Los modelos de inteligencia artificial (IA) han demostrado su eficacia en escenarios predefinidos, pero su desempeño puede verse comprometido cuando se encuentran con situaciones inéditas. En estos casos, la ética debe guiar su desarrollo y aplicación. Esta fue una de las ideas centrales en un reciente encuentro virtual organizado por la consultora tecnológica Capgemini, donde se discutieron las tendencias tecnológicas que marcarán el año 2026.
La Ética Como Pilar Fundamental
Marc Roberts, director del Laboratorio de Prospectiva en IA de Capgemini, enfatizó que la esencia de la ética radica en tomar decisiones adecuadas en ausencia de un manual. Esta capacidad de juicio es precisamente lo que muchos sistemas de IA carecen actualmente, especialmente cuando no hay datos que guíen sus respuestas. Abordar la ética como un componente técnico puede ayudar a disminuir la dependencia de entrenamientos amplios y, según Roberts, estamos experimentando un cambio en la narrativa del sector: «Nos dirigimos hacia sistemas híbridos», indicó, sugiriendo una combinación de modelos físicos y matemáticos con IA generativa para crear soluciones más sólidas y alineadas con las realidades empresariales.
En los últimos años, se ha priorizado la creación de prototipos llamativos en lugar de modelos que generen valor tangible. “Es hora de dejar el espectáculo y dar paso a la realidad”, subrayó Roberts, quien considera que 2026 será «el año de la verdad» para la inteligencia artificial.
AI Transformando el Software
Capgemini también destaca que la IA se convertirá en una fuerza transformadora en el ámbito del software. La consultora anticipa que la inteligencia artificial no solo programará nuevo código, sino que gestionará todo el ciclo de vida de los sistemas. Esto podría llevar a la reconstrucción de gran parte del software actual en los próximos años, marcando un cambio radical en la forma en que se desarrollan las aplicaciones.
La Revolución del Multi-Cloud
Otra de las tendencias identificadas por Capgemini es la transición de la nube tradicional hacia un modelo multi-cloud, donde diversas nubes independientes operan de manera coordinada. Georgina Smith, líder de la división de Cloud, argumenta que este enfoque es crucial para garantizar la resiliencia y soberanía de los datos, especialmente en sectores críticos como defensa, transporte y sanidad. “Un incidente en la nube puede afectar millones de sistemas y poner en riesgo la estabilidad de gobiernos”, advirtió.
Automatización Inteligente y Soberanía Digital
La cuarta tendencia es la incorporación de la inteligencia artificial en tareas repetitivas dentro de las organizaciones. Capgemini señala que, aunque resulta complejo, este proceso implica descomponer las operaciones corporativas para integrar de manera efectiva la IA. Con esto, plantea una pregunta crucial: ¿Cómo colaborarán humanos y máquinas? La respuesta radica en que la IA debería proponer y ejecutar tareas, mientras que los humanos toman las decisiones estratégicas.
Por último, la soberanía digital se ha convertido en un tema de creciente relevancia. Nicolas Gaudillere, director tecnológico de Capgemini en Francia, destacó la necesidad de controlar tecnologías críticas en la cadena de valor digital, como datos, IA, nube y ciberseguridad. Sin embargo, enfatizó que no se trata de aislarse, sino de mantener el control en un entorno de interdependencia. “Una autarquía total es irrealista”, concluyó.
Así, Capgemini nos invita a reflexionar sobre el futuro de la inteligencia artificial y su papel en el entorno empresarial, destacando la importancia de integrar la ética y garantizar una cooperación efectiva entre humanos y tecnologías.
