Crisis en la CNMC: Destitución del Subdirector de Regulación en Medio de Controversia sobre Retribución de Redes

Crisis en la CNMC: Destitución del Subdirector de Regulación en Medio de Controversia sobre Retribución de Redes

El consejo de administración de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha tomado una decisión contundente: la destitución de Ismael Bahíllo como subdirector de Regulación Económico-Financiera y Precios Regulados. Este cambio, propuesto por la presidenta del organismo, Cani Fernández, se oficializará el 1 de enero y ha suscitado grandes interrogantes en el sector.

Contexto del Cese

La decisión se anunciaba en el orden del día enviado a los consejeros el pasado viernes y se produce en un momento crítico: justo al finalizar las discutidas circulares sobre la retribución de las redes eléctricas para los próximos seis años, y a pocos meses del desarrollo de las normas relacionadas con las redes de gas natural que entrarán en vigor en octubre de 2026. Vale recordar que Cani Fernández concluirá su mandato dentro de siete meses, lo que añade más tensión a esta situación.

Fuentes del sector señalan que Bahíllo fue cesado debido a las diferencias internas respecto a las circulares de las redes eléctricas, especialmente acerca de la tasa de retribución financiera (TRF) que debería aplicarse a la distribución eléctrica hasta 2031. A pesar de que su departamento se encargó de diseñar dicha tasa, Bahíllo demandaba mejoras en la propuesta. Sin embargo, otros informes sugieren que su relación con Rocío Prieto, la directora de Energía, y con la misma presidenta, era complicada desde hacía tiempo. Cabe destacar que Bahíllo tiene una trayectoria que se remonta a su paso por la antigua Comisión Nacional de la Energía (CNE), que se fusionó con la CNMC en 2013.

Sorpresa en el Sector

La destitución ha causado gran revuelo en el sector energético. Muchos esperaban que, en los meses previos a la conclusión de un mandato, se adoptara un enfoque más conservador. Este cambio inesperado en el liderazgo llega en un momento crítico, justo cuando se están afinando las circulares relacionadas con la retribución del sector.

Consultada sobre este cambio, la CNMC afirmó que el proceso de nombramiento y cese de directivos es competencia del Pleno, y que los directores no intervienen en estas decisiones. En relación con las circulares mencionadas, la CNMC aseguró que el Pleno había respaldado ampliamente el trabajo de los equipos técnicos implicados.

Alegaciones de las Empresas

En otro ámbito, las grandes compañías eléctricas—Endesa, Iberdrola, Naturgy y EDP—junto con la asociación Aelec, presentaron el lunes sus alegaciones al Consejo de Estado respecto a la propuesta normativa de la CNMC. Este Consejo ahora debe revisar el expediente, devolviéndolo con o sin objeciones. Es crucial que las circulares sean aprobadas antes del 28 de diciembre para que puedan entrar en vigor el 1 de enero; de lo contrario, la retribución actual, que se sitúa en un 5,58%, será prorrogada durante seis años.

Las empresas consideran que la TRF propuesta, un 6,58%, es insuficiente y apuntan a un mínimo del 7%. Además, la nueva metodología de cálculo de la retribución en la distribución ha sido tachada de «discriminatoria» frente a las redes de transporte en alta tensión. Esta situación introduce riesgos adicionales en las inversiones de distribución, algo que no ocurre con el transporte, donde se mantiene el porcentaje anterior.

Aunque el Ministerio para la Transición Ecológica alinea estas propuestas con su política, también advierte sobre la necesidad de considerar el perfil de riesgo diferente entre la distribución y el transporte, descartando incentivos para infraestructuras de gas, que no forman parte de la transición energética deseada.

Las empresas han presentado sus alegaciones por separado, pero coinciden en advertir que la tasa de la CNMC es desigual en comparación con redes de otros sectores regulados, como telecomunicaciones y transporte aéreo, donde se asume el riesgo de retribuir las inversiones según la demanda. Además, defienden que la TRF para transporte se mantiene en el mismo nivel que la de distribución, a pesar de que esta última continúa con un modelo anterior que no arriesga flujos de capital.