Web3 es, indudablemente, una de las tecnologías que más promete de cara a los próximos años. De hecho, es un ámbito que lleva el suficiente tiempo existiendo y que ya cuenta con una enorme comunidad de usuarios y developers. Esta comunidad está amoldado a su funcionamiento, algo indispensable para avanzar en un ambiente renovador.
En específico, en los últimos tiempos el ámbito ha vivido una enorme evolución tanto en la experiencia de usuario en las dApps como en la sofisticación de las herramientas de las que disponen los desarrolladores. Sin embargo, esta tecnología no ha logrado llegar a un público masivo.Ppor el instante, es un ámbito reservado para los más entusiastas de la tecnología. En este contexto, el próximo reto para Web3 es lograr llegar a un público general. Este reto plantea ciertas contrariedades tanto en el plano técnico como en el estructural.
Antes de entrar en detalle en el enorme reto que supone la popularización de Web3… es indispensable examinar las prácticas que se han extendido en los últimos tiempos y que hoy día ya proponen ciertas problemáticas.
En primera instancia, es fundamental tomar en consideración que ya no marcha el término de lanzar un proyecto al mercado asociándolo a Web3 con el único objetivo de levantar rondas de financiación. Del mismo modo, tampoco es útil sacar un token al mercado con el propósito de “estafar” a una comunidad. Así puesto que, es preciso quitar de la ecuación esta clase de proyectos. Habría que poner en valor los profesionales que desean adentrarse al ámbito con el propósito de solventar inconvenientes reales y aportar valor al ecosistema.
Este planteamiento es una realidad que defienden compañías y desarrolladores reputados del ámbito, quienes se hallan con estos inconvenientes de forma frecuente. En este sentido, es positivísimo que los primordiales players del ámbito sean siendo conscientes de esta situación. Esto va a ayudar a trabajar en el sentido contrario y localizar una solución a esta problemática.
El reto: desarrollar un producto capaz para el usuario respetando los valores de Web3
Pero, ¿en qué género de casuísticas se da esta desvirtuación de Web3? Imagina que un developer desarrolla un juego usando la tecnología blockchain a fin de que el usuario sea el dueño de sus skins y sus assets. Tras validar múltiples fases beta compendiando el retroalimentación de los jugadores se logra desarrollar un juego entretenido y que engancha. Sin embargo a fin de que tenga sentido es imprescindible que los jugadores cuenten con una wallet en la que guardar estos coleccionables digitales. En exactamente la misma línea, asimismo es preciso que el usuario tenga tokens para abonar los gas fees de la red. Ambas casuísticas proponen una gran restricción y dismuyen de manera notable el público al que se dirige el juego.
Entonces, ¿de qué manera es posible solventar este inconveniente? Una de las soluciones más habituales sería incorporar un sistema de custodia donde el propio juego integre un software a fin de que el jugador pueda interaccionar con las funciones del juego que requiera de la parte blockchain. Esta solución deja al desarrollador producir y proteger los wallets, absteniendo la necesidad de contar con su wallet. Imaginaros si como usuarios ya nos da vagancia registrarnos en una web aún es más bastante difícil lograr que cada usuario cree su wallet. Parece una solución simple, ¿verdad? No obstante, se trata de una vía que deforma por completo los principios de Web3.
En otras palabras, el hecho de que el desarrollador del juego integre una wallet y sea responsable de protegerla priva al usuario de ser dueño de sus assets digitales. Este paso significa quitar una de las mayores ventajas que brinda Web3.
Además, supone una mayor dificultad de cara al desarrollo del producto, suponiendo un mayor gasto implica un mayor gasto de dinero y de recursos. Finalmente, se ofrece un juego donde los usuarios no gozan de las ventajas que ofrece la tecnología blockchain. Asimismo, a nivel técnico esta realidad asimismo pone encima de la mesa otro potencial punto de fallo: padecer un ataque que robe todas y cada una de las private keys. El ejemplo expuesto es obviamente una simplificación de la problemática actual. El ejemplo pone el foco en la relevancia de localizar una solución estandarizable que no suponga la perturbación de los principios básicos de Web3.
En este campo, uno de los casos que más se ha acercado a localizar una solución es el caso de los coleccionables que lanzó Reddit.
En este caso, desde Reddit creaban mismos la wallet para el usuario sin guardar la private key en su base de datos. Este se guardaría en el dispositivo que facilitaban al usuario y este era absolutamente responsable de su activo. Además, Reddit se hacía cargo de los costos de los gas fees y creó una pasarela de pago en Fiat para la adquisición de tokens. Esta comunidad recibió realmente bien el lanzamiento de estos coleccionables digitales y a su vez dejó instantes tan jocosos como la imagen de abajo. Se puede observar a un usuario con un NFT como fotografía de perfil asegurando que detesta los NFT’s. Un claro ejemplo de que el público general no termina de entender los aplicativos de la tecnología blockchain.
La trasparencia de Web3 estimula un ecosistema más fuerte
Para terminar, es esencial reconocer que los profesionales del ámbito nos sostengamos optimistas y confíemos en que los fallos que se han cometido en el último año (como el desastre de la caída de FTX o los cientos y cientos de millones de pérdidas en hackeos en protocolos DeFi, depeg de USD Coin (USDC)…) sean una palanca a fin de que la comunidad de developers esté más motivada que jamás. En Web3 todo el código de qué manera las transacciones son públicas y por esta razón cada nuevo ataque hace más fuerte al ecosistema de forma global.
Así puesto que, si bien la evolución del ámbito blockchain plantea grandes retos en los próximos meses, seguro que va a haber grandes propuestas renovadoras por la parte de las compañías que lideran el ámbito.
Sobre el autor: Fabiano Dias
Alex Encinas es un joven emprendedor centrado en las ocasiones que ofrece el extenso planeta de la programación y la tecnología blockchain. Alex es cofundador de RacksLabs, compañía líder en servicios de web3 en España y, además de esto, es Lead Teacher de Disrup3, academia de programación experta en Web3. El autoaprendizaje, la curiosidad y la perseverancia en el trabajo son los pilares de todos y cada uno de los proyectos en los que se implica.
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Monterrey (México), 1990. Estudió una licenciatura en comunicación y comenzó trabajando en medios locales de su ciudad, como periódicos, revistas, estaciones de radio o canales de televisión. Tiene un gran interés por la cultura mexicana, incluyendo la música, la comida y la historia. Es un apasionado de los deportes, especialmente del fútbol.