Iberdrola ha anunciado la venta del ochenta% de sus activos de generación en México por seis mil millones de dólares estadounidenses —unos cinco mil cuatrocientos setenta y nueve millones de euros—. El conjunto ha comunicado este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que las filiales Iberdrola Generación México e Iberdrola Renovables México han subscrito un pacto de pretensiones con la sociedad participada por el Estado mexicano Mexico Infrastructure Partners (MIP) a fin de que un fideicomiso privado gestionado por MIP adquiera la totalidad del capital de múltiples sociedades que titulares de centrales de generación. La capacidad instalada total sosten a la transacción es de ocho mil quinientos treinta y nueve megavatios (MW), de los que ocho mil cuatrocientos treinta y seis se corresponden a ciclos combinados de gas y ciento tres a un parque eólico terrestre.
Los activos que son parte de la transacción son los ciclos combinados de gas Monterrey I y II, Altamira III y IV, Altamira V, Escobedo, La Laguna, Tamazunchale I, Baja California y Topolobampo II y III, además del parque eólico terrestre La Venta III. Todos operan todos ellos bajo el régimen de Productores Independientes de Energía contratados con la Comisión Federal de Electricidad. Se incluyen asimismo los ciclos combinados de gas privados Monterrey III y IV, Tamazunchale II y Enertek. Con esta operación, el conjunto se queda con solo dos mil cuatrocientos veintisiete MW de los prácticamente once que tenía en el país. mil ciento sesenta y seis MW de ellos se corresponden a centrales de ciclo combinado, doscientos dos MW a cogeneración y mil cincuenta y nueve MW a renovables.
La valoración acordada para la venta de estos activos (”en términos de valor compañía o enterprise value, libre de caja y de deuda, de las sociedades titulares de los activos”, apunta el comunicado remitido a la CNMV) asciende a cerca de seis mil millones de dólares estadounidenses estadounidenses. Esta cantidad, matiza el conjunto, podría alterarse dependiendo de la data de cierre de la transacción y de otros “posibles ajustes usuales en este tipo de acuerdos”.
Encuentro en el Palacio Nacional
El presidente de la energética, Ignacio Sánchez Galán y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se han reunido esta mañana en el Palacio Nacional y han anunciado el comienzo de una nueva etapa tras la firma del pacto, conforme ha informado la compañía. Ambos se han comprometido en avanzar en el desarrollo de las energías renovables en el país, un campo en el que Iberdrola prosigue siendo líder.
“El acuerdo alcanzado con Iberdrola, que permite avanzar en la implementación de la nueva política energética de México, supone el inicio de una nueva etapa en la que la compañía participará activamente en el desarrollo renovable del país”, ha dicho el presidente de México. Sánchez Galán, por su lado, ha señalado que “Iberdrola agradece el apoyo y la flexibilidad mostrada por el Gobierno de México para alcanzar este acuerdo, a la vez que considera a México un país estratégico con potencial de crecimiento y expansión donde mostrará su apoyo a México y al Estado desarrollando capacidad renovable”.
El anuncio de desinversión llega poco una vez que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticase sin miramientos a múltiples compañías españolas que operan en el país. “Abusaron de nuestro país y de nuestros pueblos”, aseveró a mediados de febrero de dos mil veintidos en referencia a Repsol, OHL y exactamente la misma Iberdrola. En específico, el líder de Norteamérica —autor de múltiples declaraciones polémicas cara Madrid en el pasado— acusó al conjunto dirigido por Ignacio Sánchez Galán de hacer lobby para presionar contra la reforma eléctrica, una de las medidas clave de su programa de Gobierno. Uno de sus objetivos es fortalecer el campo público frente a los inversores privados.
En dos mil veinte, Iberdrola anuló una millonaria inversión para una planta de ciclo combinado en la costa atlántica de México después que la paraestatal eléctrica, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), no autorizase el suministro de gas que la planta precisaba para marchar. El Gobierno respondió diciendo que aceptaría la inversión. Además, el año pasado, el regulador mexicano, la Comisión Reguladora de Energía, sancionó a Iberdrola con nueve mil millones de pesos (unos cuatrocientos sesenta y seis millones de dólares estadounidenses en ese instante) por infringir la ley al vender electricidad a sus asociados. El fallo vino desde una demanda impuesta por CFE.
Aprobaciones
La operación está sosten al pacto y a la firma de los contratos terminantes por las partes, como a la obtención de las aprobaciones regulativas precisas y al cumplimiento de ciertas condiciones frecuentes en esta clase de acuerdos. La compañía ha trasladado que la transacción cuenta con el respaldo financiero del Fondo Nacional de Infraestructura de México (FONADIN) y otras entidades de finanzas públicas vinculadas al Gobierno mexicano.
Iberdrola México, ha asegurado el conjunto en la nota remitida a la CNMV, proseguirá prestando servicio a sus clientes del servicio actuales en ese país y, transitoriamente, a las sociedades incluidas en el perímetro de la operación, para lo que se prevé festejar contratos de compra y venta de energía con las firmas que se transmiten con el objetivo de suministrar a las compañías del Grupo Iberdrola la energía y la potencia precisas para desarrollar la generación renovable en México y cumplir con sus objetivos actuales y futuros en el país.
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Articulo original de El País
