La ciudad de Madrid avanza en su plan para convertirse en un referente de innovación con la aprobación de la Ordenanza que regulará un entorno controlado para pruebas de proyectos innovadores, conocido como sandbox. Este proyecto abrirá las puertas en la capital española para probar diferentes productos y servicios en áreas como sostenibilidad, economía, energía, movilidad y accesibilidad, entre otros.
Dentro de las iniciativas que se incluirán en este entorno destacan aquellas enfocadas en la reducción de emisiones de carbono mediante la movilidad sostenible, propuestas relacionadas con la seguridad vial a través de sistemas inteligentes de gestión del tráfico y la eficiencia en la distribución y uso de energía.
La futura normativa permitirá llevar a cabo ensayos en diversos espacios de la ciudad mediante convocatorias impulsadas por el Ayuntamiento, con el objetivo de mejorar la calidad de vida urbana. Estos ensayos tendrán una duración limitada y se seleccionarán en base a su interés y potencial impacto positivo.
La iniciativa, liderada por el Área Delegada de Innovación y Emprendimiento del Consistorio, busca facilitar la evolución tecnológica en la ciudad, atraer talento y estimular la actividad económica a través de un marco seguro para la innovación. Asimismo, busca agilizar el proceso de innovación al simplificar los trámites para la realización de pruebas de nuevas soluciones.
Con la implementación de este sandbox, el Ayuntamiento no solo busca impulsar el desarrollo de empresas, startups e innovadores en la ciudad, sino también posicionar a Madrid como referente global en innovación.
500 millones de inversión previstos
La vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, destacó el avance de la ciudad como centro de innovación en España y la importancia de contar con un espacio como el sandbox para verificar la viabilidad técnica de los proyectos innovadores. Esto apunta a resolver desafíos previos en la materialización de desarrollos basados en innovación en la región.
Según un informe de Madrid Futuro compartido por el Ayuntamiento, la implementación de este entorno para proyectos innovadores podría atraer una inversión de hasta 500 millones de euros a la ciudad. Asimismo, se espera la creación de más de 5.000 empleos tecnológicos y el impulso de Madrid como uno de los diez principales destinos mundiales para atraer talento universitario.
Además del impacto económico, se prevé un beneficio social significativo, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos mediante el acceso a servicios avanzados en áreas como salud, cultura y turismo, alineados con las innovaciones tecnológicas.