Logo de Meta en un móvil
El logo de Meta en un móvil.
Dado Ruvic (REUTERS)

Un caso de gran relevancia ha sacudido a Barcelona, donde un moderador de contenido ha decidido interponer una querella contra Meta, la empresa matriz de Facebook, por la falta de medidas ante lo que él describe como «tortura psicológica». Esta situación se desencadenó a raíz de su empleo en CCC Barcelona Digital Services entre los años 2018 y 2020, donde se encargaba de la moderación de contenido en las redes sociales de Meta, como Facebook, Instagram o WhatsApp, eliminando material violento. Este trabajo le llevó a tener que visualizar videos perturbadores que incluían escenas de violencia extrema, violaciones, suicidios y torturas, lo cual según la querella, le causó un grave daño emocional.

El trabajador, junto a otros empleados, luchó para que sus bajas médicas por problemas derivados de este entorno de trabajo fueran reconocidas como accidentes laborales, lo cual finalmente se logró en enero pasado tras una resolución judicial. La Inspección de Trabajo de la Generalitat también intervino, imponiendo una multa a la empresa por deficiencias en la evaluación de riesgos psicosociales en el lugar de trabajo.

Posteriormente, se presentó una querella en el año 2023 contra la empresa CCC Barcelona Digital Services, su compradora Telus International, y algunos directivos, destapando fallos en las medidas de seguridad laboral en la Torre Glòries de Barcelona. Ahora, la querella se amplía hacia Meta, responsabilizándola de las condiciones laborales del denunciante y alegando incumplimientos en la normativa de prevención laboral.

El abogado a cargo de este caso, Francesc Feliu, señala que las condiciones de trabajo descritas implicaban un constante incumplimiento de la normativa laboral en cuanto a prevención de riesgos. Los empleados se veían obligados a visualizar contenido extremadamente perturbador y seguir pautas estrictas para su evaluación, lo que generaba un ritmo de trabajo agobiante. Todo esto, según la querella, causó daños psicológicos irreparables en el demandante.

El trabajador acusa a Meta de delitos contra los derechos laborales y la integridad moral, exigiendo una indemnización y solicitando que un representante legal de la empresa sea interrogado en el juzgado.

Adrian Cano

Santander (España), 1985. Después de obtener su licenciatura en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, decidió enfocarse en el cine y se matriculó en un programa de posgrado en crítica cinematográfica. Sin, embargo, su pasión por las criptomonedas le llevó a dedicarse al mundo de las finanzas. Le encanta ver películas en su tiempo libre y es un gran admirador del cine clásico. En cuanto a sus gustos personales,  es un gran fanático del fútbol y es seguidor del Real Madrid. Además, ha sido voluntario en varias organizaciones benéficas que trabajan con niños.