Volkswagen plantéandose cerrar fábricas en Alemania por primera vez

Volkswagen, el reconocido grupo automovilístico, está contemplando una medida drástica en su historia: el cierre de fábricas en Alemania con el objetivo de reducir costes. Esta acción incluiría poner fin al acuerdo con los sindicatos que garantiza la estabilidad laboral hasta 2029, algo inédito en los 87 años de la compañía. La noticia ha generado un impacto positivo en los mercados, reflejado en un aumento del 2,2% en las acciones de la empresa.

El CEO de Volkswagen, Oliver Blume, mencionó que el entorno económico se ha vuelto más desafiante y que la competencia ha aumentado, en parte debido a la llegada de marcas chinas con propuestas atractivas en precio y prestaciones, especialmente en el segmento de vehículos eléctricos. Esta situación, sumada a la incertidumbre en torno al futuro de los vehículos eléctricos y la estabilización de sus ventas, ha llevado a una distribución reducida de un mercado aún limitado, donde la clase media no ha adoptado masivamente los vehículos eléctricos debido a sus altos costos en comparación con los de gasolina o híbridos no enchufables.

A pesar de que Volkswagen lideró en facturación mundial en el primer semestre de 2024, con casi 159.000 millones de euros, sus beneficios se mantuvieron bajos en comparación con otros competidores del sector. Este escenario evidencia un margen de ganancias ajustado, que se ve afectado por el aumento en la facturación pero la reducción de márgenes.

La posible decisión de cerrar fábricas y recortar costes en la marca Volkswagen es una estrategia para afrontar la disminución de los márgenes de ganancia. Esta medida representa un desafío para Blume, quien también dirige Porsche, ya que conflictos laborales anteriores resultaron en la salida de otros directivos de la compañía. Se planea el cierre de al menos una fábrica de automóviles de gran tamaño y un centro de componentes en Alemania, además de la suspensión de acuerdos salariales.

Volkswagen emplea a aproximadamente 650.000 personas en todo el mundo, cerca de 300.000 de ellas en Alemania. La mitad de los miembros del consejo de supervisión de la empresa son representantes de los trabajadores, y el estado de Baja Sajonia, con una participación del 20%, suele apoyar a los sindicatos.

En el pasado, desacuerdos laborales llevaron a la salida o a la disminución de mandato de altos ejecutivos como Bernd Pischetsrieder, Wolfgang Bernhard y Herbert Diess, quienes buscaban mejorar la eficiencia en las operaciones de Volkswagen en Alemania.

La situación de la marca Volkswagen contrasta con la de Seat, que ha logrado revitalizarse con el surgimiento de Cupra, una marca que ofrece mayores márgenes y productos premium. Seat cerró el año 2023 con una ganancia operativa récord de 625 millones de euros, cifra que proyecta superar en 2024 con un incremento del 9,4% en sus ganancias hasta mitad de año.