Durante el mes de junio, el precio medio diario del mercado mayorista de la electricidad (pool) cerró en 56,08 euros/MWh, experimentando un aumento del 84,47% con respecto a mayo. A pesar de esta subida significativa, el precio se mantuvo un 39% por debajo del año anterior y del promedio de los últimos cinco años en junio, según el informe mensual de Grupo ASE.
El informe destaca que la combinación de energías renovables, nucleares y de gas fue clave para cubrir la demanda eléctrica a lo largo de las diferentes horas del día. La interacción de estas fuentes energéticas generó fluctuaciones en los precios, que se asemejan a un patrón de «pato nadando», como señalan los analistas de Grupo ASE.
En este sentido, la generación fotovoltaica destacó en la composición del mix energético, representando un 23% del total de la electricidad producida, seguida de cerca por la energía nuclear y eólica, ambas con un 22%. La energía hidráulica, a pesar de reducir su aportación durante el verano, logró incrementar su generación en un 28% respecto al año anterior.
El impacto de la hidráulica en el mercado eléctrico
La hidráulica, a pesar de contribuir con un 12% de la electricidad total producida, tuvo un papel relevante en la fijación de precios en un porcentaje considerable de horas. Este aumento en la generación hidroeléctrica se vio reflejado en un incremento en el precio de oferta, alcanzando un promedio de 76,11 euros/MWh en junio.
En cuanto a las exportaciones eléctricas, el saldo con Portugal alcanzó un máximo histórico de 51 GWh/día en junio, influyendo en el aumento de precios en España al incrementar la producción de plantas de gas para satisfacer la demanda portuguesa en horas sin radiación solar.
A pesar de estas variaciones, el precio de la electricidad en España sigue siendo inferior al de otros países europeos. Solo Francia registra un precio más bajo, mientras que Alemania, mercado de referencia en Europa, se sitúa en niveles superiores.
En conclusión, el mercado eléctrico presenta una dinámica compleja, marcada por la diversificación de fuentes energéticas y la interconexión con otros países, factores que influyen en la fluctuación de precios y en la necesidad de seguir fomentando la inversión en infraestructuras para asegurar un equilibrio adecuado entre oferta y demanda a largo plazo.