En el año 2022, los hombres ganaron en promedio 25.137 euros anuales, lo que supuso 5.000 euros más que los 20.130 euros que recibieron en promedio las mujeres, según los últimos datos disponibles de la estadística Mercado de Trabajo y Pensiones en las Fuentes Tributarias. Esto coloca la brecha salarial de género en el 19,89%, lo que es el porcentaje que deberían aumentar los sueldos de las trabajadoras para igualarlos a los de los hombres. Después de años de reducción progresiva, el año pasado el recorte de esta brecha se estancó por primera vez en cinco años e incluso aumentó ligeramente desde el 19,87% registrado en 2021.
Esta estadística, elaborada por la Agencia Tributaria, es la más actualizada para medir los salarios, ya que la última medición del Instituto Nacional de Estadística (INE), la Encuesta Anual de Estructura Salarial, corresponde a 2021. Ambas mediciones reflejaban el progresivo recorte de la brecha de género, el cual se ha detenido según los datos de Hacienda.
Con motivo del Día por la Igualdad Salarial, el sindicato de funcionarios CSIF ha elaborado un informe en el que alerta que los datos de 2022 “pueden suponer un cambio de tendencia si no se adoptan las medidas adecuadas”, y advierte que a este ritmo España tardaría medio siglo en reducir esta brecha de género.
Causas de la brecha salarial
La diferencia en salarios entre hombres y mujeres se debe principalmente al mayor uso de contratos temporales y de jornadas parciales, situaciones que suelen tener menores retribuciones que los empleos fijos a jornada completa. La brecha en la contratación temporal ha aumentado un 25,5% en los últimos dos años y se ha multiplicado por 12 desde la pandemia. Además, hay casi el triple de mujeres que hombres contratadas a tiempo parcial, lo que afecta notablemente el salario promedio.
Cuando se analizan detalladamente los motivos por los que las personas trabajan con jornadas parciales, se observa que el 93% de las personas que trabajan a tiempo parcial por cuidado de familiares son mujeres.
Brecha en el sector público
En las administraciones públicas, la brecha salarial es menor, situándose en el 8%, pero la temporalidad y parcialidad afectan de forma intensa a las empleadas públicas. El salario medio de los trabajadores del sector público es de 33.931 euros anuales, comparado con los 31.268 euros de las mujeres. A pesar de esta menor brecha salarial, la inestabilidad en las Administraciones es peor que en el sector privado, ya que el número de mujeres con contratos temporales es el doble que el de hombres, mientras que las mujeres a tiempo parcial son más del triple (152.900 mujeres frente a 42.400 hombres).
Acciones para reducir la brecha de género
El sindicato CSIF ha denunciado que el Gobierno es responsable de esta desigualdad en el ámbito laboral, ya que incumple la ley orgánica de Igualdad y los Reales Decretos 901/2020 y 902/2020. Según la queja sindical, esto está permitiendo que en el sector público persistan “desigualdades salariales injustificadas en conceptos como el complemento específico, de productividad, de carrera profesional horizontal, etc”.
Es necesario tomar medidas concretas para reducir la brecha salarial y promover la igualdad de género en el ámbito laboral, ya que esto no solo beneficia a las trabajadoras, sino que también impacta de forma positiva en la economía y en la sociedad en su conjunto.
