Crear una compañía de software ya no requiere una financiación o infraestructura masivas.
Los avances en la computación en la nube, el software de código abierto y los equipos distribuidos dejan a los creadores probar ideas y lanzar productos al mercado con considerablemente más sencillez.
Para aquellos que aspiran a empezar su negocio de software, acá hay ideas contundentes que se pueden arrancar sin desembolsos de capital substanciales.
Los autónomos tienen necesidades únicas en el momento de administrar sus negocios, y muchos procuran software que les asista a agilizar la administración de clientes del servicio, facturación, contabilidad, administración de proyectos y considerablemente más. Existe una gran demanda insatisfecha de productos Software as a Service dirigidos a los sesenta millones de trabajadores del conocimiento autónomos solo en Estados Unidos.
Dado que los solopreneurs tienen presupuestos ajustados, servir a este mercado con herramientas a costes competitivos podría traducirse en un recuento masivo de clientes del servicio para los creadores que ganen tracción. La clave es centrarse en la asequibilidad y una genial atención al usuario.
Desde los consultorios médicos hasta los bufetes, pasando por los distribuidores de servicios a domicilio, prácticamente todos los ámbitos precisan software especializado para administrar la programación, la facturación, el almacenaje de documentos y considerablemente más.
Desarrollar herramientas de administración de consultas especializadas para ámbitos verticales concretos puede ser rentable y, al tiempo, satisfacer el propio interés como emprendedor familiarizado con un campo específico.
La belleza de los productos Software as a Service verticales es que no requieren grandes equipos de desarrollo para lanzar un MVP, siempre que comprenda de forma profunda las necesidades de sus clientes del servicio objetivo.
Las plataformas sin código dejan crear desde aplicaciones fáciles hasta complejos flujos de trabajo empresariales sin grandes conocimientos técnicos.
Crear tus herramientas y plantillas sin código para venderlas a otros creadores y dueños de pequeñas empresas sin conocimientos técnicos puede ser una compañía rentable.
Se calcula que el mercado de las herramientas de creación basadas en la nube medrará a un ritmo anual incesante superior al quince% hasta dos mil treinta, conforme prosiga la digitalización en todos y cada uno de los ámbitos.
Hay mucho margen para reinventar la manera de crear aplicaciones y mecanizar labores con plataformas sin código simples de utilizar.
Desde ebooks, cursos, material del archivo y temas hasta complementos, plantillas y considerablemente más, los empresarios tienen muchas opciones en el momento de crear sus productos de tipo digital sin un desarrollo inicial notable.
Puedes dirigirte a diferentes nichos de público y probar a vender de forma independiente ya antes de buscar financiación externa.
La creación de una microempresa basada en productos de tipo digital aprovecha el poder de Internet para asistirte a validar e iterar velozmente tus ofertas.
Con el apogeo de las aplicaciones de correo y la adopción de automatizaciones de productividad en muchas empresas, los bots y las automatizaciones se han transformado en una prometedora idea de start-up de bajo costo.
Tampoco es preciso tener grandes conocimientos técnicos para crear algo valioso.
Con tantas herramientas de automatización y API de lenguaje natural libres hoy en día, es plenamente posible lanzar un bot viable mínimo útil en solo unas semanas para entonces conseguir financiación para una funcionalidad más avanzada.
El cambio cara el trabajo recóndito e híbrido provocó una gran demanda de software de apoyo a los equipos distribuidos. Mientras que los operadores tradicionales como Monday y Asana dominan el espacio, hay espacio para nuevos participantes que atienden a configuraciones de equipo concretas con peculiaridades únicas y costes competitivos.
Las empresas, aun con veinte empleados, tienen ahora con cierta frecuencia personal recóndito, por lo que los productos que facilitan una mejor coordinación y trasparencia para los equipos híbridos podrían ganar tracción velozmente.
Crear un producto complejo desde cero requiere un enorme esmero inicial. Un enfoque alternativo es la marca blanca o la reventa de productos Software as a Service existentes para nichos concretos.
Prefiero centrarme en la distribución ya antes que en la creación.
En sitio de crear desde cero algo que solo unos pocos desean, es más simple iniciar revendiendo algo que ya existe a conjuntos concretos que lo precisan.
Los países en desarrollo y los mercados emergentes tienen necesidades de aplicaciones únicas que los operadores establecidos aún no han abordado de manera eficaz. Los desarrolladores locales son los más indicados para crear aplicaciones para sus comunidades.
He tenido un enorme éxito con aplicaciones que ofrecen servicios como pagos, logística y telesalud a clientes del servicio de África que tienen opciones limitadas.
Se pueden crear negocios increíbles que sirvan a mercados ignorados con aplicaciones móviles accesibles».
Las empresas dependen de un mosaico de aplicaciones inconexas que precisan compartir datos sin grietas. La creación de integraciones y herramientas API facilita la labor de salvar las distancias.
El mercado de las plataformas de integración está medrando a un ritmo del doce%, muy sobre el software empresarial por lo general.
Las start-ups tienen acá la ocasión de hacerse un hueco desarrollando middleware, agregadores y conectores adaptados para casos de uso concretos.
Mientras que el lanzamiento de una compañía Software as a Service tradicional apoyada por capital peligro puede requerir millones de financiación de antemano, continuar un modelo de arranque centrado en mercados desatendidos deja iniciar con solo una conexión a Internet y una gran idea.
Los conceptos de bajo costo de este artículo pueden suministrar a los aspirantes a creadores un punto de inicio para desarrollar sus empresas de software resistentes a la recesión.
Llevar a cabo una investigación estricta de los clientes del servicio, maquetar esquemas y lanzar MVP muy básicos puede asistir a calibrar la demanda velozmente ya antes de comprometerse con sprints de ingeniería completos. Nunca ha habido un instante más simple para iniciar e iterar.
Bogotá (Colombia), 1989. Apasionado por la investigación y el análisis de temas de interés público. Estudió comunicación social en la Universidad de Bogotá y posteriormente obtuvo una maestría en periodismo investigativo en la Universidad de Medellín. Durante su carrera, ha trabajado en diversos medios de comunicación, tanto impresos como digitales, cubriendo temas de política, economía y sociedad en general. Su gran pasión es el periodismo de investigación, en el cual ha destacado por su habilidad para descubrir información relevante y sacar a la luz temas que a menudo se mantienen ocultos.
