Entre 2010 y 2024, la demanda global de combustibles sostenibles ya se duplicó, lo cual destaca la crucial influencia de la política para un crecimiento más acelerado en este ámbito. La AIE sostiene que, si se aplican de manera efectiva las políticas ya existentes y se eliminan las barreras del mercado, la adopción de combustibles sostenibles podría casi duplicarse en solo seis años. Esto no solo alentaría la inversión en capacidad de producción adicional, sino que también respondería a la creciente demanda.
Para lograrlo, el organismo hace hincapié en que los marcos de políticas deben ser flexibles y receptivos a nuevas tecnologías. Esto facilitará la entrada de combustibles emergentes que diversifiquen las materias primas y fortalezcan la resiliencia del suministro energético.
Recomendaciones para un Futuro Sostenible
El informe sugiere que se establezcan hojas de ruta claras, objetivos específicos y políticas de apoyo adaptadas a las realidades regionales, alineadas con una visión energética más amplia. Entre otras recomendaciones, se destaca la necesidad de aumentar la previsibilidad de la demanda, lo que fortalecería la confianza del mercado e impulsaría la inversión. También es fundamental fomentar la innovación para disminuir las diferencias de costos y crear cadenas de suministro integradas que respondan a las necesidades de infraestructura, contribuyendo así al desarrollo económico a largo plazo.
Además, los combustibles sostenibles brindan múltiples beneficios al sector energético al complementar la electrificación y mejorar la eficiencia. Resultan especialmente relevantes para sectores que continúan dependiendo de soluciones basadas en combustibles, como la aviación y el transporte marítimo, así como parte del transporte terrestre.
Beneficios Económicos y Ambientales
La AIE enfatiza que estos combustibles no solo mejoran la seguridad energética, sino que también potencian el desarrollo económico y promueven la sostenibilidad ambiental. Por ejemplo, en 2024, se estima que los biocombustibles líquidos reducirán en 5 a 15 puntos porcentuales la dependencia de las importaciones de combustible en países relevantes, contribuyendo a una reducción de aproximadamente 2,5 millones de barriles diarios en la demanda mundial de petróleo.
El organismo también resalta que la producción y uso de combustibles renovables pueden generar nuevas fuentes de ingresos, impulsar el crecimiento industrial y crear una amplia gama de empleos a lo largo de toda la cadena de valor. Actualmente, aunque estos combustibles representan apenas el 1,3% del consumo total de energía a nivel global, su impacto varía significativamente en diferentes países, alcanzando casi el 10% en Brasil.
Impacto Futuro y Oportunidades de Inversión
Para el año 2035, se espera que los combustibles sostenibles cubran un 10% de la demanda mundial de transporte por carretera, un 15% en aviación y un 35% en transporte marítimo. Los biocombustibles líquidos y gaseosos continuarán siendo los más importantes y se anticipa que satisfarán aproximadamente dos tercios de la demanda total de combustibles sostenibles, con un aumento significativo en el uso de combustibles basados en hidrógeno.
La AIE estima que, entre 2024 y 2035, las inversiones en combustibles sostenibles podrían alcanzar los 1,5 billones de dólares (cerca de 1,3 billones de euros), generando cerca de dos millones de nuevos puestos de trabajo, especialmente en economías emergentes. Esto no solo promete oportunidades de desarrollo económico, sino que también apoya el crecimiento sostenible a nivel global.
Avances en España: Repsol y la Sostenibilidad
En el contexto español, Repsol se ha diferenciado al apostar por los combustibles renovables como un pilar clave en la descarbonización del transporte. Recientemente, la empresa anunció una fabricación a gran escala de gasolina de origen 100% renovable, un hito en su complejo de Tarragona. Asimismo, está en proceso la construcción de su planta de combustibles sintéticos en Bilbao, que utilizará CO2 extraído de la atmósfera e hidrógeno renovable, con una previsión de inicio para 2026.