En virtud de las nuevas leyes que regulan la fiscalidad de los activos virtuales en España, los ciudadanos españoles deberán declarar los activos de criptomonedas en el extranjero en el primer trimestre de dos mil veinticuatro.

Los españoles tendrán que declarar los criptoactivos extranjeros

La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) de España ha publicado el Modelo setecientos veintiuno, un formulario de declaración de impuestos para los activos virtuales en el extranjero. El plazo de presentación del Modelo setecientos veintiuno empezará el 1 de enero de dos mil veinticuatro y concluirá el treinta y uno de marzo de dos mil veinticuatro. Los impositores personas físicas y jurídicas deberán declarar los activos en criptomonedas en tanto que los tengan en sus cuentas en el extranjero a treinta y uno de diciembre.

Entre las personas físicas, la obligación de declarar sus activos en el extranjero solo afectará a aquellos cuyo saldo de criptomonedas supere el equivalente a cincuenta euros. Los ciudadanos que sostengan sus activos en carteras no protegidas y en cuentas de empresas españolas deberán declarar sus activos a través del modelo normalizado setecientos catorce. 

Cabe indicar que los funcionarios de la AEAT han acentuado sus sacrificios para gravar a los titulares de criptomonedas en España en dos mil veintitres. Según El Mundo, en el mes de abril de dos mil veintitres, la Agencia Tributaria mandó trescientos veintiocho mil notificaciones a quienes no habían pagado impuestos sobre las criptomonedas pertinentes al año fiscal de dos mil veintidos. Al mismo tiempo, el número de avisos aumentó un cuarenta% en comparación con dos mil veintidos, cuando se emitieron ciento cincuenta advertencias, al paso que los impositores en España solo recibieron quince avisos de esta clase en dos mil veintiuno.

Recordemos que el mercado de España de criptomonedas en dos mil veintitres se estaba desarrollando activamente. Por ejemplo, en el mes de septiembre se supo que el criptoexchange Coinbase recibió licencia para operar en España y comenzó a prestar servicios a inversores minoristas e institucionales.

José Manuel Gómez Aparicio