Bruselas acredita el plan presupuestario del Ejecutivo de España, mas advierte de que la situación fiscal es desafiante o “muy difícil”. Al tiempo demanda un plan estricto para reducir el déficit y la deuda pública. “Claramente, habrá necesidad de establecer una estrategia fiscal creíble a medio plazo”, apuntan fuentes del Ejecutivo comunitario. Cree que las líneas básicas que le mandó el Gobierno, estando aún en funciones, se ajustan a sus recomendaciones de gasto e inversión. No obstante, hay múltiples impedimentos. La Comisión Europea prevé que España superará el tres% del déficit, va a llegar al tres,2%, y eso va a suponer que el año que le va a aplicar el procedimiento de déficit excesivo.
El examen que ha hecho a Bruselas a España tiene un asterisco grande. El proyecto de presupuestos generales aún no ha sido aprobado y las líneas básicas de las cuentas pueden mudar mucho cuando llegue en su forma terminante. Por eso demanda que lo antes posible “el nuevo gobierno mande un boceto de presupuestos actualizado con el que se espera que adopte el Congreso.
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