«Mi experiencia, tanto como presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) como en mi labor en la Administración, me ha llevado a insistir mucho en este aspecto. Ahora lo observo desde una nueva perspectiva», señaló Escrivá.
La Necesidad de Evaluaciones Independientes
El gobernador recordó que algunas normativas, como la relacionada con las pensiones, ya contemplan este tipo de evaluaciones. En este contexto, la AIReF debe evaluar cada tres años si los objetivos de la ley se están cumpliendo. Si no es así, la AIReF debe comunicarlo al Gobierno y al Parlamento para que se tomen las medidas pertinentes. Este enfoque fue uno de los principales impulsores de Escrivá durante su etapa como ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Escrivá citó también el Ingreso Mínimo Vital (IMV), que contiene una disposición que exige a la AIReF realizar evaluaciones sistemáticas para verificar si los efectos deseados se están materializando.
Un Modelo a Seguir: Dinamarca y los Países Nórdicos
El gobernador propuso que «sería deseable» que todas las leyes incluyan evaluaciones obligatorias realizadas por entidades independientes. Si bien en España existe la AIReF, Escrivá destacó que las comunidades autónomas pueden desarrollar sus propias agencias de evaluación.
Escrivá toma como ejemplo a Dinamarca y otros países nórdicos, donde existen entidades especializadas que evalúan constantemente las políticas públicas. Estas instituciones, al identificar deficiencias en la gestión, no dudan en levantar la voz y solicitar cambios.
«En España existe un déficit en la evaluación, especialmente en lo fiscal a medio plazo», advirtió. Subrayó que esta carencia es crucial para mejorar la calidad institucional y optimizar la gestión pública. A pesar de que el corto plazo se maneja de forma adecuada, Escrivá enfatizó la necesidad de planificación y una perspectiva más amplia, lo que a menudo marca la diferencia en el desempeño del sector público entre diferentes países.