Recientemente, emprendí un emocionante viaje de cuatro horas desde mi ciudad natal, Motown, hasta el vibrante Chicago, donde disfruté de un fin de semana inolvidable. Me alojé en el Kimpton Gray, un hotel que encapsula la esencia de la elegancia urbana. Situado en un antiguo banco de 1894, el Gray combina la robustez del medio oeste con un estilo contemporáneo. Imagínate un lugar donde podrías esperar ver a Don Draper relajándose con un cocktail en la barra, especialmente considerando que la famosa agencia de publicidad Leo Burnett, inspiración para el icónico programa, se encuentra justo en el corazón de The Loop, centro cultural y comercial de la ciudad.
Check-in: Elegancia y Calidez
Al entrar en el hotel, la mezcla de solemnidad arquitectónica y sofisticación te envuelve. El vestíbulo, un amplio espacio de mármol blanco, irradia un aire de éxito, mientras que el personal te recibe con una calidez que hace que te sientas como en casa. Mi perrita Lucy fue la estrella del momento, recibiendo la mayor parte de la atención. Lo interesante del diseño es que el vestíbulo se encuentra en la segunda planta, con un animado bar que flanquea el mostrador principal, un detalle que agrega un toque único.
Tu habitación en el hotel es un modelo de sobriedad, decorada en sutiles tonos gris, con ropa de cama impecable y un baño que parece sacado de una revista de diseño. Tómate un momento para admirar los detalles arquitectónicos antes de explorar el minibar mientras planeas tu siguiente aventura. Un detalle especial es la bañera exenta que ofrece impresionantes vistas de los rascacielos; es el lugar perfecto para relajarte mientras escuchas blues de Chicago.
Explorando la Arquitectura de Chicago
Inicia tu aventura en Chicago con un cautivador Crucero Arquitectónico de 90 minutos por el Río Chicago. Esta es, sin duda, una de las maneras más espectaculares de sumergirte en la historia arquitectónica de la ciudad mientras disfrutas de un día soleado. A bordo del barco con Wendella, una empresa familiar con casi un siglo de antigüedad, un carismático guía te conducirá a través de historias sobre el crecimiento y la reinvención de Chicago. A medida que navegas, tendrás la oportunidad de ver el emblemático Edificio Wrigley y las famosas torres de Marina City. Es una experiencia más que gratificante y una forma divertida de descubrir la ciudad sin necesidad de caminar excesivamente.
Arte, Gastronomía y Ambiente
Tras la excursión, te recomiendo visitar el Instituto de Arte de Chicago, un delicioso viaje entre las obras maestras de Monet, Hopper y otros grandes artistas. Después de perder la noción del tiempo entre los lienzos, dirígete a Cindy’s Rooftop en la Asociación Atlética de Chicago. Disfruta de un cocktail mientras la vista del Parque del Milenio y del lago Michigan te recuerdan la grandeza de estar en una de las metrópolis marítimas más impresionantes del mundo. La magnitud del Instituto requiere más de una visita para ser completamente absorbida, especialmente su moderna ala diseñada por Renzo Piano, que también creó el Museo Whitney en Nueva York.
Al caer la noche, disfruta de una cena en The Dearborn, una elegante brasserie, donde los cócteles son originales y el filete con papas fritas es un verdadero deleite. En una ciudad con fuertes raíces italianas, una buena pasta y pizza son imperdibles. La trattoria La Bella, del Kimpton Gray, ofrece platos bien elaborados, como el pollo a la parmesana sobre una cama de cappellini, y una pizza de higos y prosciutto que combina dulce y salado de manera excepcional. Aunque la pizza gruesa de Chicago no es mi preferida, no se puede visitar sin probar un auténtico hot dog local en Superdawg, un clásico durante más de 75 años.
Noches de Fiesta y Recuperación en Boleo
De vuelta en el Gray, te espera una última copa en Boleo, el lounge en la azotea que se transforma en un paraíso tropical al caer la noche. Bajo su techo de cristal retráctil, la atmósfera es vibrante, llena de música y cócteles que vuelan de las manos de los asistentes. Opta por una bebida ahumada para cerrar la noche con estilo, mientras bailas hasta que tu Fitbit te avise que es momento de descansar. Un consejo: al registrarte, recibirás cupones gratuitos para cócteles en Boleo, un detalle muy apreciado.
Conclusión
El Kimpton Gray no es un hotel para los que buscan pasar desapercibidos. Es el destino ideal para quienes desean disfrutar de un fin de semana inolvidable, cargado de ingenio, buena compañía y arquitectura impresionante. Desde su vestíbulo elegantemente restaurado hasta las vibraciones festivas de su azotea, es el lugar perfecto para una escapada lujosa en este rincón de Chicago que se ha reinventado sin jamás mirar hacia atrás. A pesar de ser un orgulloso habitante de Detroit, debo reconocer que quedé maravillado por la energía y el dinamismo de esta extraordinaria ciudad.
