X, ya antes Twitter, ha anunciado que va a cobrar 1 dólar al año a nuevos usuarios de la plataforma en Filipinas y Nueva Zelanda. El programa, llamado “Not A Bot” (no un robot, en inglés), tiene como propósito reducir el número de bots (cuentas automatizadas) y limitar así “el spam y la manipulación” de la red social. El pago de esa subscripción simbólica anual “no está pensada para generar ganancias”, afirma la compañía, sino más bien pues las subscripciones “han demostrado ser la principal solución que funciona a escala” contra el uso de bots.

La plataforma dejará aún la creación de nuevas cuentas sin el pago de la subscripción, mas no van a poder interactuar: ni publicar, ni dar me gusta, ni publicar de nuevo. Las únicas opciones toleradas para las nuevas cuentas gratis van a ser de “solo lectura” y continuar cuentas. Los bots van a poder, supuestamente, continuar utilizándose para hinchar las cantidades de seguidores, mas ya no para propagar contenido.

Elon Musk, dueño de la plataforma, ha sondeado la opción de que todos y cada uno de los usuarios de X paguen por emplear la red social. Hace unas semanas, en una entrevista con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que se proponía cobrar “una pequeña mensualidad” a los usuarios existentes para quitar los bots.

La resolución de X llega en unos días donde la desinformación anega la red por el enfrentamiento entre Israel y Hamás. Una de las medidas más promovidas por Musk para combatirla, las Notas de la Comunidad, ha anunciado asimismo hoy que desde este momento las notas “requerirán fuentes” con links. “No hemos requerido esto anteriormente, ya que algunas notas no necesitan fuentes”, explica el anuncio de la compañía. “Pero esos casos son menos comunes y creemos que el impacto general de este cambio será positivo”, agrega.

Musk respondió a ese anuncio de su compañía recordando su particular cruzada contra los medios tradicionales: “Tendremos que vigilarlo. Lo que importa son los enlaces a fuentes de datos reales, no algún artículo de prensa tonto. Muchas organizaciones de medios ya no tienen modelo de negocio ni circulación significativa: simplemente existen como herramientas de propaganda para sus propietarios”, escribió en X.

Adrian Cano

Santander (España), 1985. Después de obtener su licenciatura en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, decidió enfocarse en el cine y se matriculó en un programa de posgrado en crítica cinematográfica. Sin, embargo, su pasión por las criptomonedas le llevó a dedicarse al mundo de las finanzas. Le encanta ver películas en su tiempo libre y es un gran admirador del cine clásico. En cuanto a sus gustos personales,  es un gran fanático del fútbol y es seguidor del Real Madrid. Además, ha sido voluntario en varias organizaciones benéficas que trabajan con niños.