EFE.- Flagstar Bank, una filial del New York Community Bancorp, ha llegado a un pacto para adquirir la mayoría del Signature Bank tras su colapso e intervención por la parte de las autoridades.
Desde este lunes, las cuarenta sucursales que tenía Signature operarán como Flagstar Bank, que se ha hecho con casi la totalidad de los depósitos de la entidad y con una parte de su cartera de préstamos, conforme anunció a última hora del domingo la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, en inglés).
La FDIC, que aceptó el control del banco este mes tras intervenir asimismo al Silicon Valley Bank (SVB), explicó en un comunicado que la mayoría de los clientes del servicio se trasferirán de manera automática al Flagstar Bank, una entidad con una esencial cartera hipotecaria.
Mientras, la operación no incluye unos cuatro con cero millones de dólares americanos en depósitos que eran una parte del negocio de banca digital del Signature y que seguirán a cargo de la FDIC, que se ocupará de atender las peticiones de esos clientes del servicio.
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La adquiere incluye en suma la adquisición de unos treinta y ocho con cuatrocientos millones de dólares americanos en activos del Signature, incluidos préstamos por unos doce con novecientos millones, por un costo de descuento de dos con setecientos millones, conforme el anuncio.
Además, la FDIC va a recibir hasta trescientos millones de dólares americanos del New York Community Bancorp, la matriz de Flagstar, y preservará unos sesenta con cero millones en préstamos del Signature, que aún podría vender en el futuro.
La corporación afirmó que espera que el costo final del colapso del Signature que aceptará el fondo de garantía sea de unos dos con quinientos millones de dólares americanos.
Al cierre de dos mil veintidos, Signature tenía unos ochenta y ocho con seiscientos millones de dólares americanos en depósitos y unos activos totales de unos ciento diez con cuatrocientos millones, más o menos la mitad de los que tenía el SVB, para el que la FDIC por el momento no ha encontrado comprador.
San Salvador (El Salvador), 1997. Desde pequeña ha sentido una gran pasión por la escritura y la investigación, lo que la llevó a especializarse en reportajes de impacto social. En su tiempo libre, disfruta de la lectura de novelas históricas y de misterio, y también es una gran amante de la música, especialmente del rock latinoamericano. Además, es una ávida viajera, y ha tenido la oportunidad de visitar algunos países de América Latina y Europa para conocer diferentes culturas y enriquecer su visión del mundo.