El Futuro del Petróleo Venezolano: ¿Reservas Inexploradas o Oportunidad Perdida?

El Futuro del Petróleo Venezolano: ¿Reservas Inexploradas o Oportunidad Perdida?

El aumento de la presencia militar de EE.UU. en la costa venezolana ha despertado el interés de analistas de RBC, quienes creen que podría haber un cambio de régimen en el primer trimestre del año. Una de las preguntas más relevantes en este escenario es qué sucederá con las operaciones petroleras del país, que en 2009 llegaron a producir más de 3 millones de barriles diarios. Dado que el suministro global es de aproximadamente 100 millones de barriles, un cambio en Venezuela podría tener un impacto considerable, evitando que las crisis en otras regiones provoquen un aumento desmesurado en los precios del petróleo.

Sin embargo, en el mes anterior, Venezuela exportó apenas 900,000 barriles diarios. La producción ha ido disminuyendo desde 2006, cuando Hugo Chávez decidió despedir a 19,000 trabajadores en huelga de PDVSA, la petrolera estatal. En 2007, Chávez expropió a los socios extranjeros, lo que resultó en la pérdida de experiencia y capital en el sector. La infraestructura petrolera del país también ha sufrido deterioro, y las sanciones de EE.UU. han obligado a incluir a PDVSA en su lista negra.

Optimistas del sector apuntan que, si se levantaran las sanciones, Venezuela podría experimentar un aumento rápido en la producción de varios cientos de miles de barriles diarios. Chevron, la única gran compañía estadounidense que sigue operaciones en el país, ha demostrado que es posible obtener ganancias incrementales cuando se otorgan exenciones por parte de Washington. Sin embargo, para lograr aumentos más significativos, se necesita una inversión considerable y un entorno operativo estable, dos elementos que Venezuela ha carecido durante años.

Según Wood Mackenzie, las empresas que operan en el principal campo de producción, el Cinturón del Orinoco, requerirían entre 15,000 y 20,000 millones de dólares en inversión a lo largo de la próxima década solo para añadir 500,000 barriles diarios. Además, gran parte del petróleo venezolano es crudo pesado o extrapesado, que requiere un procesamiento exhaustivo antes de ser comercializable. Analistas de Stifel indican que, en el mejor de los casos, solo se podrían recuperar unos 100,000 barriles diarios de petróleo más ligero en un futuro cercano.

El papel del ejército venezolano es crucial, ya que está estrechamente vinculado a las operaciones de PDVSA. En cualquier transición incierta, podría surgir el riesgo de desorden, especialmente porque Washington muestra poco interés en un despliegue terrestre prolongado. Por otro lado, los productores estadounidenses tienen pocos incentivos para invertir grandes sumas en Venezuela, dado que los precios del crudo son bajos y existen suministros alternativos fácilmente disponibles en regiones como el oeste de Canadá. Todo esto sugiere que el petróleo venezolano podría seguir sin ser explotado.