El sector automotriz vislumbra un futuro prometedor para el próximo año. Tras un notable aumento en las ventas de un 14,7% entre enero y noviembre, que se traduce en 1,045 millones de unidades, se espera que 2026 marque el regreso a los niveles de matriculaciones previos a la pandemia. Según Faconauto, la asociación que representa a los concesionarios en España, las proyecciones indican que se alcanzarán entre 1,25 y 1,3 millones de vehículos vendidos, un punto de meta crucial que refleja las cifras de 2019.
Factores Impulsores de la Crecimiento en Ventas
El crecimiento previsto encuentra respaldo en múltiples factores. Por un lado, se han implementado incentivos variados tanto a nivel autonómico como nacional. Varias comunidades han activado planes renove desde 2025 para fomentar la compra de vehículos de combustión nuevos y desechar automóviles viejos y contaminantes. Además, el Gobierno ha destinado 800 millones de euros en ayudas para la adquisición de coches, con una división de fondos que incluye el programa Moves y la nueva iniciativa Auto+, que promete mayor agilidad y se lanzará en 2026.
Faconauto también destaca otros importantes elementos que influyen en la demanda: mayor confianza del consumidor, un incremento en la renta disponible, niveles moderados de inflación y tipos de interés a la baja. Esta combinación fortalece el panorama automotriz, haciendo que la demanda de vehículos electrificados crezca sin cesar. Se estima que la cuota de mercado de estos vehículos podría alcanzar un 33%, un notable aumento respecto al 19,3% registrado en los primeros once meses de 2025.
Nuevos Modelos Asequibles en el Mercado
Uno de los aspectos que fortalecerán este crecimiento es la llegada al mercado de vehículos nuevos a precios competitivos, especialmente modelos por debajo de los 25,000 euros antes de considerar ayudas gubernamentales. Además, se están desarrollando varios de estos automóviles en Europa, incluyendo cuatro modelos eléctricos que Volkswagen producirá en sus plantas de Navarra y Martorell.
El Plan Auto 2030 y Desafíos Pendientes
En otro ámbito, Josep Maria Recasens, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (Anfac), enfatizó la relevancia del Plan España Auto 2030. Esta hoja de ruta, presentada hace poco, prevé movilizar inversiones de entre 35,000 y 39,000 millones de euros hasta 2030. Incluye 400 millones en ayudas a la compra, 580 millones para un nuevo Perte VEC y 300 millones destinados al programa Moves Corredores, que busca establecer puntos de recarga accesibles en carreteras.
Sin embargo, el sector enfrenta retos importantes. Uno de ellos es la necesidad de una nueva fiscalidad que permita autofinanciarse, evitando depender de fondos gubernamentales cada seis meses. Recasens destacó que, a pesar de los 400 millones en ayudas logrados, la cantidad es limitada respecto a las necesidades del sector. Además, aún quedan por definir los detalles del nuevo Plan Auto+, que se centrará en subvencionar coches eléctricos e híbridos, pero no abarcará la instalación de puntos de recarga en centros comerciales o supermercados.
Por último, el sector sigue a la expectativa de la reunión entre la Comisión Europea y los fabricantes, que definirá las medidas de flexibilidad vigentes hasta 2030 y 2035, periodo en el que se prevé cesar la venta de coches de combustión. Recasens resaltó la importancia de conocer las herramientas de flexibilidad que tendrán, como créditos de CO2 por el desguace de vehículos viejos y incentivos por el uso de combustibles alternativos.
El futuro del sector automotriz en España parece alentador, pero los desafíos persisten. Con políticas adecuadas y la innovación en modelos asequibles, el horizonte puede estar más cerca de lo esperado.
