BCE mantiene tipos en el 2% y eleva sus proyecciones de crecimiento para la eurozona

BCE mantiene tipos en el 2% y eleva sus proyecciones de crecimiento para la eurozona

El Banco Central Europeo (BCE) mantiene su rumbo estable y no parece tener intenciones de ajustar los tipos de interés, que se sitúan en un 2% por cuarto mes consecutivo. Este hecho señala una clara confianza en la estabilidad de la inflación, que actualmente se encuentra en un 2,1% en la zona euro. Además, las perspectivas de crecimiento son alentadoras: el Eurobanco ha revisado al alza sus proyecciones para el Producto Interno Bruto (PIB), anticipando un avance significativo en los años por venir.

Proyecciones de crecimiento optimistas

Los economistas del BCE han elevado sus pronósticos, proyectando un crecimiento del PIB del 1,4% para 2025, en comparación con el 1,2% anterior. Las expectativas para 2026 también se han mejorado, llevando la cifra estimada a un 1,2%, un incremento frente al 1% anterior. Para 2027, se espera un repunte adicional del 1,4%, y por primera vez, se ha introducido una previsión para 2028, también con una mejora del 1,4%.

Un futuro con estabilidad en los precios

Los pronósticos inflacionarios también han sido ajustados. Se espera que la inflación promedio para este año se mantenga en el 2,1%, una cifra sin cambios respecto a las estimaciones anteriores. Para 2026, se prevé una leve disminución al 1,9%, mientras que se mantendrá en ese mismo porcentaje durante 2027. Para 2028, se estima que la inflación suba ligeramente hasta alcanzar el 2%, alineándose con el objetivo del BCE. Esto sugiere que los próximos años podrían transcurrir sin sobresaltos inflacionarios, lo que a su vez permitiría que los tipos de interés permanezcan estables si las condiciones se mantienen favorables.

A pesar de estas proyecciones optimistas, el BCE cierra 2025 con cuatro recortes de tipos, igualando la cifra del año anterior. En 2024, los tipos se redujeron del 4% al 3%, mientras que en el presente año la disminución fue del 3% al 2%. La mayoría de los expertos considera que el ciclo de rebajas ha llegado a su fin, a menos que ocurra un imprevisto que lleve a la eurozona a una posible recesión.

Riesgos y perspectivas de futuro

El futuro escenario más incierto para una posible reducción adicional de tipos dependerá de la evolución de los precios de la energía, que actualmente están en declive, y de la apreciación del euro frente al dólar. Si estas condiciones continúan, el BCE podría tener cierto margen para un último recorte.

No obstante, dentro del Consejo de Gobierno del BCE existe una perspectiva cautelosa. Figuras prominentes, como la economista alemana Isabel Schnabel, han comenzado a cuestionar la viabilidad de nuevos recortes, sugiriendo que, posiblemente, la próxima medida podría ser al alza. Entre los factores en juego están el incremento del gasto fiscal en países como Alemania y el envejecimiento poblacional, aspectos que podrían presionar los salarios y precios hacia arriba.

Aunque el debate está abierto y las predicciones a menudo son desafiadas por la realidad, parece que la tranquilidad en las decisiones del BCE permanecerá más tiempo del anticipado por algunos. En el contexto actual, lo que parecía ser una inminente reducción de tipos se transforma en una prolongada pausa monetaria. Es probable que esta «siesta» económica dure más de lo que muchos habían pronosticado.