La reciente quiebra de Sonder, una compañía estadounidense de alquiler de apartamentos, ha generado una ola de preocupación en el sector hotelero. Este revés ha tenido un impacto inmediato en grandes nombres como Marriott, y ha encendido las alarmas entre otras empresas de apartamentos turísticos en Europa, como Numa y Limehome. La inquietud se centra en la vulnerabilidad de un modelo de negocio que combina una elevada deuda, respaldada por fondos de capital riesgo, con un crecimiento desmedido en su cartera de propiedades.
Un vistazo al crecimiento y las cifras
Sonder, que recaudó 640 millones de euros, así como Numa y Limehome, que obtuvieron 133 y 85 millones respectivamente, se han expandido rápidamente, acercándose cada una a las 10,000 unidades de alojamiento. Sin embargo, Limehome se distancia claramente de Sonder. Según Ricardo Fernández, director general de Limehome en España, Portugal y Francia, la diferencia principal radica en la estrategia de expansión.
Este enfoque observado en Sonder, que alguna vez alcanzó las 16,000 habitaciones, se caracterizó por la búsqueda de propiedades grandes y diversas, incluso incursionando en el negocio de la restauración, lo que elevó automáticamente los costos operativos. En cambio, Limehome ha crecido recientemente a la cifra de 10,000 habitaciones, centrándose en ubicaciones centrales y propiedades más pequeñas sin servicios adicionales.
Rentabilidad, costos y equilibrio financiero
Un aspecto crítico es cómo ambas empresas manejan los costos. Mientras que Sonder destinaba un 45% de sus ingresos a los propietarios, Limehome opera con un promedio del 32%. Esto permitió que Limehome mantuviera un equipo más pequeño, con aproximadamente 300 empleados en comparación con las 1,200 personas de Sonder, lo que llevó a que las presiones por alcanzar rentabilidad fueran menos severas.
El 80% de los ingresos de Limehome provienen de España y Alemania, donde ya ha logrado resultados positivos; sin embargo, aún enfrenta desafíos en mercados como Francia e Italia, en donde busca expandirse. Aunque están obteniendo beneficios en sus mercados más rentables, la incertidumbre persiste sobre si esto será suficiente para ayudar a cubrir las pérdidas en otros países.
Resultados destacables y proyecciones
En 2024, Limehome reportó un ingreso de 22 millones de euros y logró su primer beneficio neto de un millón de euros. Las expectativas son altas para este ejercicio, ya que prevén récords en ambas cifras. La compañía ya está en una situación de economía de escala, lo que sugiere que su modelo de negocio es sostenible.
Con 850 unidades actualmente operativas, Limehome planea añadir 1,700 más en los próximos cinco años, llevando su total a 2,400 unidades. Su ambición final es alcanzar las 10,000 habitaciones. La clave de su éxito radica en su solidez financiera; su margen de propiedad se acerca al 30%, y sus ingresos superan casi dos veces sus obligaciones de arrendamiento.
Reflexiones finales sobre el caso Sonder
Desde Limehome enfatizan que Sonder se centró durante demasiado tiempo en la expansión y el posicionamiento de marca a expensas de la rentabilidad. Su alianza estratégica con Marriott, aunque prometedora, llegó demasiado tarde en un mercado complejo y competitivo. Esta situación ha servido como una lección sobre la importancia de un crecimiento equilibrado y sostenible en el sector hotelero.
La contraposición entre el enfoque de Limehome y Sonder subraya la relevancia de la solidez financiera sobre un crecimiento agresivo y destaca la necesidad de adaptar los modelos de negocio a las realidades del mercado.
