El Boom de la Inteligencia Artificial: Un Eco de los Años 90 en los Mercados Financieros

El Boom de la Inteligencia Artificial: Un Eco de los Años 90 en los Mercados Financieros

Fred Hickey, editor de la newsletter The High-Tech Strategist, ha sido una voz crítica y constante desde finales de los años 90, advirtiendo sobre los riesgos del mercado tecnológico. Mientras los fervientes entusiastas, conocidos como bubbleheads, le dejaban mensajes hostiles, Hickey se ganó la confianza de inversores que, como él, tenían un enfoque más pesimista. Aunque sus predicciones se han materializado, cometió un error notable en diciembre de 1999 al afirmar que nunca volvería a ver algo igual. Sin embargo, ahora, después de décadas en el sector, observa que la actual locura del mercado podría ser aún más extrema.

Un Observador Independiente

Desde 1987, Hickey ha estado publicando su boletín, un proyecto modesto que no se apoya en una plataforma digital; se vende por correo postal y PDF, y su diseño se ha mantenido intacto durante 25 años. Radicado en Nashua, New Hampshire, Hickey se mantiene al margen de las presiones de Wall Street y de la euforia desenfrenada de Silicon Valley. Se compara con el personaje de Hans Christian Andersen que, con valentía, señala la verdad: «el emperador va desnudo».

La Especulación en el Mercado Actual

Hickey no se ha quedado callado ante los excesos del presente. Observa un mercado lleno de especulación, con intrusos que apuestan alto en opciones de un solo día, catalizados por la política monetaria expansiva de la Reserva Federal. A su juicio, la euforia actual es comparable a la de la era de las puntocom, con una notable preocupación por el auge de las criptomonedas y el mínimo histórico de efectivo en fondos de inversión.

El auge de la inteligencia artificial (IA), según Hickey, eclipsa cualquier otra tendencia. Un informe reciente de JPMorgan destaca que 41 acciones relacionadas con la IA constituyen casi la mitad del S&P 500, pero Hickey advierte que, a diferencia de finales de los 90, muchas startups evitan cotizar, logrando financiamiento sin tener que salir a la bolsa.

El Escepticismo Frente a la IA Generativa

Si bien Hickey fue un defensor de internet como tecnología transformadora, hoy es escéptico acerca del verdadero impacto de la IA generativa. Esta, aunque se presenta como una revolución que podría curar enfermedades y transformar la productividad, carece de fundamentos sólidos para estas afirmaciones. Destaca las limitaciones de los grandes modelos de lenguaje (LLM), que muchas veces no pueden razonar ni adaptarse y son propensos a errores, conocidos como «alucinaciones». A pesar de décadas de desarrollo y de significativas inversiones, Hickey espera en vano una aplicación revolucionaria que demuestre lo contrario.

Voces Críticas en el Mundo de la IA

El escepticismo sobre la IA generativa también proviene de líderes en el campo. Yann LeCun, científico jefe de IA en Meta, ha resaltado que, a pesar de que estos modelos contienen vastos volúmenes de información, aún no han realizado descubrimientos significativos. Richard Sutton, otro destacado académico, sostiene que los LLM carecen de la capacidad de aprender de la experiencia, mientras que Gary Marcus argumenta que los chatbots solo ejecutan trucos ingeniosos, sin verdadero entendimiento.

Hickey concluye que las fallas inherentes a la GenAI se reconocerán eventualmente. Esto dará lugar a un ajuste en el mercado tecnológico, donde los excesos de servidores y almacenamiento se evidenciarán, seguido de un desplome en las valoraciones, como sucedió hace 25 años.

El análisis de Hickey y la voz de otros críticos nos obligan a reflexionar sobre el futuro de la tecnología, instándonos a ser cautelosos ante el frenesí actual. La historia nos ha enseñado que, tras la euforia, a menudo vienen las correcciones.