El BCE advierte sobre los peligros de las ‘stablecoins’ para los Bonos del Tesoro estadounidense

El BCE advierte sobre los peligros de las ‘stablecoins’ para los Bonos del Tesoro estadounidense

Las stablecoins, también conocidas como criptomonedas estables, están marcando un hito en el sistema financiero al disparar su valor de mercado y captar la atención de los bancos centrales. Su relevancia trasciende el uso como simple alternativa a los depósitos tradicionales o medio de transacción; su crecimiento rápido plantea interrogantes sobre la estabilidad financiera global.

Un vistazo al crecimiento vertiginoso de las stablecoins

En un avance del informe de estabilidad financiera que el Banco Central Europeo (BCE) publicará este miércoles, se señala cómo estas criptomonedas han alcanzado un valor histórico de 280.000 millones de dólares, representando el 8% del mercado total de criptoactivos. Este auge las convierte en uno de los mayores tenedores de letras del Tesoro de EE.UU. Sin embargo, el BCE advierte que un retiro masivo de usuarios podría generar una venta precipitada de activos, afectando la operativa de los mercados de deuda estadounidense.

¿Qué son las stablecoins?

Las stablecoins operan utilizando la misma tecnología que Bitcoin – la blockchain – y su valor está generalmente ligado al dólar estadounidense. A diferencia de Bitcoin, que es altamente volátil, estas criptomonedas están respaldadas por reservas financieras, que incluyen depósitos bancarios y activos líquidos. Su regulación en Europa está sujeta al reglamento MiCAR, mientras que en EE.UU. se basa en el Genius Act. Sin embargo, el BCE destaca que su mayor vulnerabilidad es la disminución de la confianza en su canje a valor nominal. Esto es crucial, especialmente para las más populares, como USDT y USDC, emitidas por Tether y Circle, respectivamente.

Impacto en el sistema financiero

El BCE alerta que la concentración del mercado es un riesgo significativo, pues solo dos emisores dominan aproximadamente el 90% de todas las stablecoins en circulación. Una crisis, incluso si no es sistémica, en una sola entidad podría desencadenar un efecto dominó en todo el sistema. En el ámbito de los criptoactivos, las stablecoins están ganando terreno como la forma preferida para operar en plataformas de intercambio, representando cerca del 80% de todas las transacciones en exchanges centralizados.

A pesar de su creciente influencia, las stablecoins aún no se utilizan ampliamente para transacciones cotidianas en el mundo físico, especialmente en Europa, donde el volumen de stablecoins vinculadas al euro es de apenas 395 millones de euros frente al mercado total mencionado anteriormente. Sin embargo, si su adopción se generaliza, podrían provocar una importante fuga de depósitos hacia estas criptomonedas, afectando la sostenibilidad financiera de los bancos tradicionales.

La necesidad de regulación adecuada

En Europa, el reglamento MiCAR prohíbe a los emisores de stablecoins ofrecer intereses sobre sus tenencias, tratando de limitar la atracción que estas puedan tener frente a depósitos tradicionales. El BCE sostiene que es esencial establecer un marco regulatorio unificado a nivel mundial para mitigar riesgos, dado el rápido crecimiento de las stablecoins y su potencial para causar desestabilización. En conclusión, aunque las stablecoins están comenzando a ejercer una influencia significativa sobre la economía global, su futuro podría presentar nuevos retos que demandan una atención aún mayor por parte de los reguladores financieros.