El Auge de la Comida Preparada: Una Amenaza para los Restaurantes

El Auge de la Comida Preparada: Una Amenaza para los Restaurantes

El auge de los platos preparados en España: un cambio en los hábitos de consumo

El consumo de platos preparados en España está viviendo un verdadero auge. Este fenómeno, que ya es bien conocido en otros países como Reino Unido y Estados Unidos, se ha convertido en una de las principales palancas de crecimiento para los supermercados locales. La oferta de estos productos está expandiéndose rápidamente, fortaleciendo una categoría que ha estado más que desarrollada en el extranjero.

La visión de los supermercados

Juan Roig, presidente de Mercadona, ha señalado recientemente que uno de sus principales objetivos es aumentar la oferta de alimentos «listos para comer». Según sus proyecciones, en dos décadas podríamos ver desaparecer las cocinas en los hogares. Más allá de sus vaticinios, la tendencia es evidente: cadenas como Dia o Consum también están apostando fuerte por esta categoría dentro de sus estrategias comerciales.

Crecimiento sorprendente en cifras

De acuerdo con los datos del Ministerio de Agricultura, los platos preparados lideraron el crecimiento en consumo alimentario en 2024, con un incremento del 5,1% en comparación con el año anterior, en un contexto donde el mercado general se contrajo un 0,2%. En los siete primeros meses de este año, el crecimiento se intensificó hasta un 5,8%, siendo superado solo por el aceite. En términos de valor, el segmento movió cerca de 4.700 millones de euros, lo que demuestra que los consumidores están dispuestos a aceptar precios más altos.

Factores detrás de la tendencia

Enrique Porta, socio de KPMG, explica que esta tendencia es impulsada por factores demográficos. El incremento de personas viviendo en grandes ciudades y la reducción del tiempo libre disponible llevan a muchos a buscar alternativas más prácticas. Los hogares monoparentales y unipersonales también están en aumento; el INE proyecta que, para 2039, los hogares unipersonales representarán un tercio del total, incrementándose un 40%. María del Carmen, de 41 años y que vive sola, subraya que estos platos son perfectos para cuando no tiene tiempo de cocinar.

Competencia entre supermercados y restauración

Además del cambio en los hábitos de consumo, el mundo de los supermercados está reconociendo su capacidad para captar momentos de consumo que antes pertenecían a la hostelería. Un informe conjunto de KPMG y la asociación Marcas de Restauración indica que el 55% de los operadores ven a los supermercados como competidores directos. Este fenómeno se hace especialmente presente en entornos laborales y en áreas turísticas.

La evolución del producto

Aunque la idea de los platos preparados no es nueva, su formato y consumo han evolucionado. Gracias a la tecnología moderna, ahora es posible ofrecer productos de mejor calidad. Raúl Martín, consejero delegado de Familia Martínez, proveedor clave para Mercadona, asegura que la inversión en procesos ha permitido la transición de productos pasteurizados a opciones horneadas o asadas, lo que ha mejorado notablemente su sabor y apariencia.

Vistas al futuro

Otras empresas, como Bó de Debó e Industrias Alimentarias de Navarra (IAN), están también adaptándose a la creciente demanda, apostando por la frescura de sus productos. Ambas compañías esperan incrementos significativos en sus ventas, y reconocen que el futuro se centra en ofrecer opciones cada vez más atractivas y saludables.

Cambios en la industria alimentaria

La presión de los consumidores por simplificar las etiquetas de ingredientes y reducir conservantes es un desafío que los fabricantes deben abordar. Si bien los gratinados y pastas son actualmente los platos más solicitados, la capacidad de las empresas para diversificar sus ofertas será clave. Enrique Porta destaca que la evolución de estos productos puede transformarlos de una simple solución a un hábito habitual de consumo, siempre que se adapte la oferta a diferentes dietas y necesidades.

A pesar de las proyecciones de Roig sobre la desaparición de las cocinas, muchos coinciden en que, aunque el uso de estas pueda disminuir, la cultura culinaria en España es demasiado fuerte como para desaparecer por completo. Así, el futuro de los platos preparados en el país se vislumbra brillante, convirtiéndose en un pilar esencial del mercado alimentario.