Desmitificando la Inteligencia Artificial: La Fuerza que Transformará Nuestro Futuro

Desmitificando la Inteligencia Artificial: La Fuerza que Transformará Nuestro Futuro

En la mitología china, el huli jing es un zorro que puede transformarse en un humano, usualmente una mujer hermosa, pero su naturaleza es dual: puede ser tanto bondadoso como maligno. Esta dualidad refleja el dilema contemporáneo de la inteligencia artificial, que puede ser un avance extraordinario o, por el contrario, un riesgo para la humanidad.

La historia de la humanidad ha sido marcada por el progreso y la innovación, y ahora, más que nunca, la conversación en el ámbito financiero gira en torno a la inteligencia artificial. Este 2025 marcará un hito, pues se cumplen 70 años desde que el término “inteligencia artificial” fue definido por primera vez en la histórica Conferencia de Dartmouth. La inteligencia artificial generativa ha abierto un panorama inexplorado, donde las máquinas no solo realizan tareas, sino que también piensan, intentan razonar y, en algunos casos, incluso parecen sentir. Estamos ante una revolución tecnológica comparable a la de la máquina de vapor, el ferrocarril, la electricidad e internet.

Un Viaje Incierto

Si bien hay un consenso sobre las inmensas posibilidades de la inteligencia artificial generativa, el futuro que nos espera es, a menudo, incierto. Las revoluciones no siguen una línea recta; suelen empezar con escepticismo, seguidas de una etapa de entusiasmo, luego puede llegar la desilusión, antes de que finalmente resurja el interés. Esta tecnología tiende a evolucionar de manera continua, mejorando en eficiencia y coste.

En el ámbito de las finanzas, las acciones de las empresas relacionadas con la inteligencia artificial han demostrado una asombrosa revalorización en poco tiempo. En 2025, estas acciones están impulsando índices de manera sin precedentes. Se ha olvidado el miedo ante la disrupción que representó Deepseek y el impacto de decisiones políticas como las de Donald Trump el día de la liberación de estas tecnologías. Nvidia, por ejemplo, ha alcanzado una capitalización de mercado soberbia, llegando a cinco billones de dólares, sumando un billón en apenas 70 días. ¿Nos encontramos ante la próxima gran burbuja?

Perspectivas de Inversores

El debate sobre la posibilidad de una burbuja en el mercado de la inteligencia artificial es candente. Algunos analistas argumentan que las valoraciones de muchas empresas están sobreevaluadas, especialmente aquellas que aún no obtienen beneficios. La creciente participación de inversores minoristas, a menudo empleando estrategias de alto riesgo, se ha mantenido en niveles históricos. En una reciente conferencia de inversores, el 33% de los participantes expresó su preocupación por una posible burbuja en este sector. Sin embargo, otros expertos rechazan esta idea, citando el crecimiento sostenido de las ganancias y la solidez financiera de las empresas más consolidadas.

Estrategias para Invertir

Frente a este panorama, los inversores tienen opciones. No es necesario que un inversor sensato elija entre estar a favor o en contra de la inteligencia artificial. Más bien, debería adoptar una postura equilibrada, considerándose una tortuga en la fábula de Esopo: avanzar con calma y constancia hacia la meta a largo plazo. Existen oportunidades en el mercado que están cotizando a precios atractivos, incluso en el sector tecnológico, donde las valoraciones pueden ser más razonables.

Recuerda que la diversificación y la calidad de las inversiones son esenciales. Separarse de las modas y no dejarse llevar por el frenesí del mercado es más crucial que nunca. Es posible destinar una parte de la cartera a las tendencias emergentes, siempre que esta exposición esté bien calibrada para evitar riesgos excesivos.

El futuro sigue siendo incierto, y solo el tiempo revelará si el huli jing será un benévolo aliado o un adversario temible en la era de la inteligencia artificial. Como dice una antigua maldición china: “Que vivas tiempos interesantes”. Sin duda, los tiempos actuales son fascinantes.

Marta Campello es socia y gestora en Abante.