El mercado global de envases de vidrio ha experimentado una desaceleración, y Vidrala, una de las empresas líderes en este sector, ha sentido el impacto con un descenso del 7,56% en sus ventas, lo que se traduce en ingresos de 1.124,4 millones de euros. Este resultado también se debe a la reducción de su capacidad industrial, ocasionada por la venta de su planta en Italia en 2024. Si se consideran solo los datos orgánicos, la caída es más moderada, aunque aún significativa, con un descenso del 5,1%.
### Desafíos en Rentabilidad
La contracción en la demanda ha afectado al lucro neto de Vidrala, que ha bajado casi un 29% en los primeros nueve meses del año, totalizando 165,2 millones de euros. También el beneficio bruto de explotación (EBITDA) sufrió un retroceso del 2,6%, alcanzando los 328,9 millones de euros. Sin embargo, su margen sobre ventas ha mejorado hasta el 29,3%, gracias a procesos de eficiencia industrial y una estrategia de reducción de costos que han aumentado 150 puntos básicos.
### Estrategia Financiera Sólida
A pesar de los retos, Vidrala continúa avanzando en la reducción de su apalancamiento financiero. A fecha del 30 de septiembre, la deuda financiera neta (DFN) se situaba en 150,3 millones de euros, casi la mitad en comparación con el mismo periodo de 2024. Este nivel de deuda equivale a apenas 0,3 veces el EBITDA, un ratio excepcionalmente bajo para la industria.
### Perspectivas para el Futuro
Con la mirada puesta en el futuro, Vidrala se muestra optimista y mantiene sus previsiones para 2025. Entre sus metas destacan alcanzar un EBITDA de 450 millones de euros y generar alrededor de 200 millones de euros en flujo de caja, de los cuales ya ha acumulado 155,2 millones en los primeros nueve meses. Esto no solo refuerza su capacidad de inversión, sino que también potencia su competitividad en un mercado desafiante.
Por regiones, el sur de Europa se posiciona como el principal generador de ventas, con 563 millones de euros, seguido de Reino Unido, que aporta 436 millones, y Brasil, con 126 millones. Así, Vidrala continúa navegando por un entorno complicado, pero con una gestión financiera capaz de enfrentar los desafíos.
