El Ministerio de Hacienda se encuentra en el umbral de un cambio significativo en la financiación autonómica, un sistema crucial que provee recursos a las comunidades. Según Jesús Gascón, secretario de Estado de Hacienda, el Gobierno está trabajando en una propuesta que transformaría el actual método de entregas a cuenta —caracterizado por anticipos y liquidaciones con un desfase de hasta dos años— a un modelo más eficiente. Este nuevo sistema permitiría a las comunidades recibir de manera inmediata y en tiempo real los ingresos fiscales que les corresponden, derivados de impuestos como el IRPF, el IVA y otros impuestos especiales.
### Un Modelo Más Immediato y Eficiente
La idea es que la recaudación de impuestos compartidos, especialmente el de la renta y el que afecta al consumo, se transfiera simultáneamente a las comunidades y al Estado. De este modo, se eliminaría la necesidad de un largo proceso de adelantos y liquidación definitiva que el sistema actual exige. Esta es una propuesta novedosa y se presenta justo cuando se está gestando un modelo específico de financiación para Cataluña, lo que sugiere que el Ministerio está preparando un plan más amplio que podría beneficiar a otras regiones.
La iniciativa no irá en contra del sistema existente, sino que se ofrecerá como una opción voluntaria para las comunidades que deseen adoptar este nuevo enfoque. Gascón hizo esta aclaración durante su intervención en el XXXV Congreso de la Asociación de Inspectores de Hacienda en Salamanca, donde se destacó la importancia de un sistema flexible.
### Marco Legal y Cambios Necesarios
Cualquier modificación en el sistema de financiación autonómica requerirá la actualización de leyes como la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca) y otras normativas relacionadas con la gestión tributaria. El sistema actual, que lleva en vigor desde 2009, se basa en proyecciones de ingresos tributarios que, una vez realidad, se ajustan mediante liquidaciones dos años después. Esto puede resultar poco eficiente y no siempre refleja con precisión la situación económica de cada territorio.
Con la nueva propuesta, las comunidades tendrían acceso a sus ingresos reales, lo que les permitiría alinear sus recursos con la evolución económica y fiscal del entorno. Sin embargo, se ha dejado claro que aquellas comunidades que prefieran mantener el esquema actual podrán seguir haciéndolo, facilitando así la planificación presupuestaria con cifras previamente confirmadas.
### Diseño de un Sistema de Gestión Tributaria
En un momento donde se analiza la financiación singular para Cataluña, Gascón compartió detalles sobre un atrevido modelo de gestión tributaria que contempla un enfoque en “red”. En este esquema, las comunidades podrían participar en la gestión de ciertos tributos, siempre bajo condiciones y límites específicos. Es importante destacar que no se prevé una cesión total de la gestión del IRPF, a diferencia de lo que ocurre con otros impuestos.
Este nuevo modelo se integraría dentro de un sistema global, utilizando la infraestructura de la administración tributaria estatal. Aunque ya hay precedentes en algunos impuestos, el objetivo es extender esta colaboración a otros tributos, como el IRPF y el IVA. La intención es que exista un trabajo coordinado y compartido entre la administración central y las autonómicas, asegurando que cada una mantenga su responsabilidad sin desintegrar las estructuras existentes.
Por último, Gascón indicó que, por ahora, no se tiene previsto ceder competencias sobre el control de contribuyentes con actividades económicas o fiscalidad internacional, argumentando que eso iría en contra de la eficiencia que se busca en el nuevo sistema. También se propuso extender a otras comunidades acuerdos similares al alcanzado con Cataluña sobre la gestión de deducciones fiscales autonómicas.
Este ambicioso plan busca no solo modernizar el sistema de financiación autonómica, sino también hacer frente a los desafíos económicos que cada comunidad enfrenta en un panorama fiscal cambiante.
