El Misterio Financiero de los Trump: ¿Cuánto Dinero Realmente Están Generando?

El Misterio Financiero de los Trump: ¿Cuánto Dinero Realmente Están Generando?

Donald Trump ha cosechado un significativo éxito financiero este año, aunque la magnitud exacta de sus ganancias sigue siendo un misterio. Este enigma no se debe a que tenga un negocio privado o a la falta de transparencia en sus declaraciones de impuestos, sino que gira en torno a un acuerdo secreto relacionado con su investidura.

En los primeros meses del año, Trump ostentaba el 70% de DT Marks Defi LLC, empresa que a su vez controlaba el 75% de la criptomoneda World Liberty Financial. Un informe financiero posterior mencionó a familiares del expresidente (presumiblemente Don Jr., Eric y Barron) como propietarios del 30% restante. Sin embargo, un representante de la Organización Trump informó en una carta a un juez de Nueva York que, en enero, la familia Trump estaba vendiendo una participación en esta empresa, lo que probablemente modificó la estructura de propiedad de DT Marks Defi, aunque los detalles aún son inciertos.

Lo más llamativo es que este acuerdo se realizó sin ninguna comunicación pública. Aunque el sitio web de World Liberty menciona la conexión con DT Marks Defi, no aclara quién es el propietario actual. Trump presentó su informe de divulgación financiera en junio, pero este refleja únicamente sus propiedades hasta el 1 de enero, dejando de lado cualquier novedad posterior. La Organización Trump, por su parte, no ha mostrado interés en revelar detalles sobre el acuerdo de enero: el porcentaje vendido, el comprador, el monto invertido ni si el trato se concretó.

Uno de los pocos aspectos claros es que DT Marks Defi LLC está generando enormes ganancias, superando a casi cualquier otro negocio de Trump. En un corto periodo, inversores, tanto novatos como veteranos del mundo cripto, compraron tokens de World Liberty por un monto cercano a los 440 millones de dólares. De esta cifra, aproximadamente 330 millones se destinaron a DT Marks Defi. Y eso fue solo el comienzo.

En abril, la empresa DWF Labs sumó otros 25 millones de dólares en tokens, de los cuales cerca de 19 millones fueron a parar a DT Marks Defi. Unas semanas después, Eric Trump asistió a una conferencia de criptomonedas en Dubái, donde se anunció que la stablecoin USD1 de World Liberty recibiría un importante impulso gracias a una inversión de 2,000 millones de dólares de una firma de inversión de los Emiratos Árabes Unidos. Esto podría traducirse en miles de millones para World Liberty, generando decenas de millones en intereses anuales y optimizando los beneficios para los propietarios de DT Marks Defi LLC.

La revista Forbes desveló por primera vez el acuerdo de venta en junio. Poco después, otra compañía de los Emiratos anunció la compra de 100 millones de dólares en monedas World Liberty, que enviaría aproximadamente 75 millones a DT Marks Defi. El 30 de junio, Trump criticó en redes sociales al periodista de Forbes que publicó esta información, denunciando la falta de veracidad en sus reportajes.

En agosto, la familia Trump llevó a cabo su mayor venta de tokens hasta la fecha. Participaron en la adquisición de una biotech que vendió numerosas acciones, utilizando los beneficios para comprar más de 700 millones de dólares en tokens World Liberty. Se estima que alrededor del 75% de esos fondos se destinaron a DT Marks Defi, que ya había recaudado cerca de mil millones de dólares en 2025.

Con base en los pocos acuerdos disponibles, Forbes y otros medios han comenzado a tabular las ganancias de la primera familia. Sin embargo, estas cifras asumen que la estructura de propiedad de DT Marks Defi se ha mantenido constante, calculando en unos mil millones para Trump y aproximadamente 150 millones para Don Jr., Eric y Barron. La cantidad exacta de las ganancias depende de los pormenores del acuerdo de enero.

Las incógnitas proliferan: ¿Cuánto vendieron exactamente los Trump y a qué precio? ¿Cómo se valoró un negocio que podría generar cientos de millones en función de una administración presidencial? ¿Acaso un comprador anónimo apostó por adquirir a bajo precio al inicio del mandato de Trump, confiando en que el propio presidente no tendría claridad sobre su futura riqueza? ¿O fue que Trump, anticipando ganancias, se aseguró un pago elevado al desprenderse de parte de su participación desde el comienzo?

Las respuestas podrían no llegar hasta mayo de 2026, momento en que el expresidente presente su próximo informe financiero. En cualquier caso, es poco probable que el cuadro sea completamente transparente: Trump ha mantenido una larga tradición de alardear sobre su riqueza al tiempo que oculta detalles esenciales del proceso.