Un panorama económico complicado
El préstamo de 149 millones de euros, autorizado para ser cargado a los Presupuestos Generales del Estado de 2023, refleja la delicada situación que enfrenta Correos. Según los datos proporcionados por el Ejecutivo, el patrimonio de la entidad ha caído drásticamente a 413 millones de euros, casi un 50% menos. Esta disminución se debe principalmente a una provisión de 430 millones de euros destinada a facilitar despidos voluntarios con el fin de rejuvenecer la plantilla.
Además, esta provisión ha impactado negativamente en otros indicadores económicos de la empresa, que actualmente dirige Pedro Saura. El resultado de explotación se ha cerrado con ‘números rojos’ cercanos a los 600 millones de euros. Otro aspecto preocupante es el fondo de maniobra, que muestra la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones a corto plazo. Este indicador se encuentra en un déficit de casi 300 millones de euros, afectado no solo por el plan de salidas voluntarias, sino también por la reducción de la deuda bancaria a corto plazo.
Retribuciones estables para la dirección
A pesar de los desafíos financieros, la retribución del personal directivo en Correos permanece fundamentalmente inalterada. Según el Gobierno, las cifras salariales para los ejercicios de 2023 y 2024 son “similares”. Las variaciones que pueden observarse se deben a un incremento salarial establecido por ley en el sector público, además de la cobertura de vacantes y las indemnizaciones por desvinculaciones.
En cuanto al absentismo laboral, el Ejecutivo no ha detallado cifras específicas, pero ha señalado que está en proceso de desarrollar un nuevo marco de relaciones laborales. Este marco se materializará a través de un nuevo convenio colectivo que tiene como finalidad la redefinición de categorías profesionales, funciones laborales, jornadas de trabajo, retribuciones y productividad, entre otros elementos. El objetivo final es mejorar las condiciones laborales y, por ende, la situación general de la empresa.