Belén Garijo: La Innovadora CEO que Lidera Merck a Nivel Global

Belén Garijo: La Innovadora CEO que Lidera Merck a Nivel Global

Una imagen icónica se ha convertido en parte de la historia de Belén Garijo (Almansa, Albacete, 1960). Apareció en la portada de la Revista Emprendimiento, y muestra a una joven Garijo, en blanco y negro, junto al entonces ministro de educación, Enrique Sánchez de León. La fotografía fue tomada en 1978, durante las protestas estudiantiles en la facultad de Medicina, que se desataron tras la implementación de un numerus clausus, limitando las plazas disponibles. “Me faltaban dos décimas para la nota. Nos encerramos varios meses en la Complutense hasta que nos admitieron”, recuerda con determinación mientras se prepara para una sesión de fotos en un camerino. “Desde pequeña supe que quería estudiar medicina; me apasionaba ayudar a la gente y curar enfermedades. Luché mucho por ello”, enfatiza Garijo, revelando su firme carácter.

Después de completar sus estudios de medicina y realizar la residencia en el hospital La Paz de Madrid, se dio cuenta de que no había vacantes como médico internista, la especialidad que anhelaba. Entonces, pragmática como siempre, decidió dar un giro hacia la industria. “Fue una decisión muy difícil”, confiesa esta hija de un funcionario y una ama de casa, mayor de cuatro hermanos. Esa elección, una de las más audaces de su trayectoria, la llevó a trabajar en algunas de las empresas más relevantes del sector farmacéutico, como Abbott, Rhône-Poulenc, Aventis y Sanofi, hasta llegar al estrellato en la alemana Merck, fundada en 1668 y hoy dirigida por la decimotercera generación de la familia.

Desde su llegada en 2011 como Chief Operating Officer de la división de Healthcare, Garijo rápidamente escaló posiciones. Diez años después, asumió el cargo de presidenta del Consejo Ejecutivo y CEO del Grupo Merck. Esta multinacional cuenta con más de 63,000 empleados y una facturación de 21,156 millones de euros en 2024, y opera en 65 países. Estos números son impresionantes, pero hay más: Garijo se convirtió en la primera mujer al frente de una empresa cotizada en el DAX, similar al Ibex-35 español, y es, junto a Ana Patricia Botín, una de las pocas españolas en la lista de Forbes USA de las Mujeres Más Influyentes del Mundo. Sin duda, es una de las figuras más poderosas en la industria científica y tecnológica global.

¿Cómo ha evolucionado en sus cuatro años como CEO y de qué logro se siente más orgullosa? La pandemia fue el inicio de su mandato. “Proteger a nuestros empleados y asegurar el suministro de medicamentos se convirtió en nuestra prioridad”, explica. Esta etapa ha sido un desafío constante, no solo ante la crisis sanitaria, sino también frente a la invasión de Ucrania, que trajo la guerra a Europa. “Estas situaciones despiertan incertidumbre y la motivación del personal; nos enseñan a mantener la guardia siempre alta”, añade.

¿Cuál es su fórmula para el éxito? “No hay estrategia eficaz sin un equipo que la ejecute. Hemos enfocado nuestras acciones en crear un ambiente de confianza y ambición, con opciones de desarrollo profesional y personal. La salud mental de nuestros colaboradores es hoy una prioridad”, subraya Garijo.

La trayectoria de Garijo ha sido un viaje por ciudades como Chicago, Nueva Jersey, Barcelona, Ginebra, París y ahora Darmstadt (Fráncfort). A pesar de sus compromisos laborales, ha logrado formar una familia. Se casó con un compañero de profesión y es madre de dos hijas. Su hija mayor compartió en una TED Talk su experiencia como hija de una mujer ejecutiva, resaltando cómo su madre siempre estuvo presente, incluso a la distancia.

Desde su llegada a Alemania en 2011, ha sentido un cálido recibimiento por parte de la cultura local. “La gente se sorprende, pero encuentro similitudes con la cultura española: es directa, abierta y acogedora hacia los extranjeros”. Aunque su papel como primera mujer CEO en el DAX le ha otorgado notoriedad, Garijo maneja esa visibilidad con serenidad. Es conocida por su frontalidad y sinceridad.

¿Cuáles considera que son sus competencias clave? Asegura que su ambición se complementa con la determinación de saber cuándo avanzar o dar un paso atrás. “He permanecido al menos tres años en cada puesto, siempre pensando en mi próximo movimiento. Levantar la mano y expresar interés es crucial para los jóvenes talentos”, destaca.

¿Qué diferencias experimenta al liderar en comparación con sus colegas hombres? Garijo sostiene que hay buenos y malos líderes independientemente del género. Sin embargo, reconoce que su estilo ha sido influenciado por su enfoque humanista, especialmente en un entorno tan técnico. “Abordo las conversaciones difíciles con transparencia; eso es lo que realmente crea respeto y facilita el feedback”, comenta.

La geopolítica ha traído retos, ¿cómo han impactado estos factores en su negocio? La situación internacional ha obligado a Merck a adaptarse rápidamente. “Reflexionamos a diez años, anticipándonos a posibles cambios y buscando un desarrollo sostenible para la empresa”, afirma Garijo.

¿Considera que la normativa europea es demasiado restrictiva? “Europa ha perdido competitividad en los últimos años. Estamos enfrentando desafíos y necesitamos actuar rápido para no quedarnos atrás. La burocracia excesiva convierte cada regulación en un laberinto difícil de atravesar”, expresa.

¿Es posible una reactivación en Europa? “Sí, ya que somos líderes en diversos sectores. No obstante, debemos diversificarnos; la competencia, especialmente de China y Estados Unidos, es creciente. La urgencia en actuar es fundamental”, concluye Garijo.

¿Cómo percibe la imagen de las farmacéuticas hoy? “Creo que esa visión es un poco desactualizada. Durante la pandemia, evidenciamos nuestro compromiso y colaboración en pro de la salud pública”, argumenta, refutando la idea de que las farmacéuticas son entidades desconectadas. “Se realizó un esfuerzo monumental por parte de la industria”, sostiene.

¿Qué lecciones ha aprendido Merck de los errores pasados de la industria? Aunque Merck no comercializa ciertos medicamentos problemáticos, está clara en su compromiso con la integridad. “La objetividad en la comunicación de los beneficios de los medicamentos es esencial”, añade.

¿Existe un sesgo de género en el desarrollo de medicamentos? Garijo apunta que han existido, pero reconoce que los ensayos clínicos actuales buscan reflejar la diversidad. “La mejora en este sentido ha sido notable en la última década”, asegura.

Merck ha impulsado el programa Healthy Women, Healthy Economies, ¿cuál es el objetivo? “Desde 2015 hemos trabajado en superar barreras en países en desarrollo para fomentar la inclusión de la mujer en posiciones de liderazgo. Nuestro compromiso con la diversidad es una de nuestras fortalezas”, destaca Garijo, quien organiza un board equilibrado, con paridad de género.

¿Cuál es el mejor consejo que ha recibido a lo largo de su carrera? “Uno de mis mentores me enseñó que, aunque trabajar duro es crucial, el verdadero secreto de mi éxito radica en construir una red sólida”, finaliza Garijo.