La asociación nacional de la industria conservera, Anfaco, ha expresado su alegría por la reciente firma de un acuerdo agrario y pesquero entre la Unión Europea y Marruecos. Este pacto, que entrará en vigor de forma provisional a partir del 3 de octubre de 2025, modifica varios protocolos para extender el trato arancelario preferencial al Sáhara Occidental.
Un dictamen del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) el 4 de octubre de 2024 estableció que cualquier acuerdo que involucrara al Sáhara Occidental debía contar con el consentimiento del pueblo local. Esto dejó claro que las preferencias arancelarias existentes no podrían aplicarse sin este consentimiento. El tribunal concedió un plazo de un año para que los cambios se implementaran, lo que significa que la situación tenía que resolverse antes del pasado sábado, 4 de octubre de 2025.
Anfaco ha calificado este acuerdo de crucial, subrayando que de él dependerían más de 30 millones de euros al año en tasas arancelarias. La organización ha estado en constante comunicación con el Gobierno de España y la Comisión Europea para encontrar una solución que evite cualquier interrupción en el comercio y asegure el suministro de materia prima a las fábricas españolas.
Detalles del Acuerdo
El acuerdo incluye importantes detalles sobre las pruebas de origen y etiquetado de los productos, que deberán indicar claramente la región de producción (Dajla y El Aaiún). También se garantiza que aquellos beneficiarios interesados en esta región obtendrán ventajas específicas.
La provisión del tratado depende aún del consentimiento final del Parlamento Europeo, el cual se espera que se concrete en las próximas semanas. Mientras tanto, los productos que provengan del Sáhara Occidental y que estén bajo el control de las autoridades aduaneras marroquíes serán elegibles para las mismas preferencias comerciales que los productos cubiertos por el acuerdo de asociación de la UE.
Roberto Alonso, secretario general de Anfaco, afirmó que la incertidumbre que había imperado sobre el tema se ha disipado justo a tiempo. «Las fábricas españolas necesitan un entorno de seguridad jurídica y un marco estable para garantizar la actividad y el suministro de alimentos pesqueros a los consumidores de manera asequible y sostenible. Agradecemos el esfuerzo y la flexibilidad de la Comisión Europea en esta situación difícil», declaró. El Sáhara Occidental y Marruecos son fuentes importantes de materias primas como pulpo, sardinas, sepias y calamares congelados. Esta resolución llega en un momento crítico, coincidiendo con la temporada de negociaciones durante las ferias Anuga y Conxemar.